Paseo Hermitage: carpas privadas instaladas y la espera por las sombrillas públicas
Transcurridos los primeros días de enero, comenzó a ejecutarse el polémico acuerdo firmado por el gobierno municipal que favoreció al empresario Florencio Aldrey Iglesias.
Los primeros días de enero ya transcurren y, muy de a poco, comienza a ejecutarse el polémico acuerdo firmado por el gobierno de Guillermo Montenegro, ni bien asumió, en torno a las playas del Paseo Hermitage – Las Toscas, convenio que favoreció al empresario Florencio Aldrey Iglesias y a la firma subconcesionaria Parador Alberus SA. Las carpas para la explotación privada ya están instaladas a pleno -en el lugar que debiera haber quedado liberado si se cumplía lo acordado en mayo pasado- y fueron colocadas, aunque todavía no funcionan, la mitad de las sombrillas con sillas para el acceso público. Mientras tanto, en el pequeño espacio que queda hacia la orilla del mar se amontonan día a día marplatenses y turistas.
La proximidad de la temporada de verano, la necesidad de “contemplar los derechos de las personas que ya contrataron la sombra fija” y de preservar fuentes laborales fueron los justificativos a los que echó mano semanas atrás el gobierno municipal para firmar el nuevo acuerdo en torno al Paseo Hermitage – Las Toscas que favorece al poder empresarial, ya que en todo el espacio que debía quedar liberado para ser de acceso público -de acuerdo al convenio firmado en mayo por el propio empresario Florencio Aldrey Iglesias con la anterior gestión- la empresa había sido habilitada para montar 120 carpas y 30 sombrillas para la explotación privada a cambio de equipar la parte que quedaba de espacio público con 200 sombrillas gratuitas.
En ese marco, y hasta este sábado a la mañana, el apartado de ese nuevo acuerdo firmado el 18 de diciembre que la que habilitó a explotar comercialmente carpas y sombrillas estaba cumplido. Por su parte, hasta el momento fueron colocadas la mitad de las 200 sombrillas gratuitas, aunque todavía no se encuentran en funcionamiento.
De esa manera, la imagen en ese sector de la playa es la que se volvió tradicional en diversos sectores de la costa marplatense: mayor espacio para carpas privadas y una gran cantidad de gente amontonada en el espacio público que queda libre hasta la orilla del mar.
Las sombrillas que debieran empezar a funcionar con acceso público -respecto de lo cual todavía no hubo ningún anuncio ni comunicación por parte del gobierno municipal ni del Ente de Turismo- fueron colocadas en uno de los costados que quedó liberado luego de la instalación de las carpas. Cabe recordar que en el acuerdo se estipuló que Parador Albersus SA debe instalar “dos patios de sombrillas móviles y gratuitas“ y fijó que cada uno de esos “patios” dispondrá “de 100 unidades de sombra cuyo equipamiento está compuesto de una sombrilla de playa con tres sillas cada una, sendero de circulación (uno de ellos accesible) y cestos de residuos en la cantidad de un juego cada 9 sombrillas”.
El acuerdo, alcanzado con la firma Parador Alberus SA a ocho días de llegar Montenegro al gobierno, lleva la firma de su subsecretario Legal y Técnico, Franklin Llan de Rosos, y presenta un detalle por demás particular: las apoderadas legales que lo llevaron adelante en nombre de la Municipalidad y el Ente de Turismo (Emtur) fueron las mismas que dos semanas antes rechazaban de plano y en duros términos los pedidos de la subconcesionaria -con la que hasta se negaban a tener vinculación a partir de una cláusula del pliego vigente- y que con el cambio de gobierno terminaron por avalar el acuerdo a partir del rotundo cambio de postura entre el gobierno saliente y el que ahora está en funciones.
En ese marco, y en cuanto a la instancia de mediación judicial, la semana pasada el juez en lo Contencioso Administrativo, Simón Isacch, dio por cerrado el proceso abierto en esa instancia a partir de “haber caído en abstracto” la disputa teniendo en cuenta el acuerdo firmado y presentado por ambas partes.
