Posada del Inti: un cumpleaños atravesado por el cierre de dos dispositivos
Esta semana la comunidad terapéutica cumplió 19 años en medio de la “tristeza” que representa el cierre de dos sedes por dificultades económicas derivadas de un insuficiente apoyo.
La comunidad terapéutica Posada del Inti atravesó un 2020 de intensa tarea porque no solo no paró de trabajar, sino que además la pandemia de coronavirus potenció los factores que hacen al consumo problemático de sustancias. Sin embargo, las falencias económicas que arrastra la institución ante la falta de un acompañamiento adecuado por parte del Estado para con el tratamiento de adicciones deriva en serias dificultades en su financiamiento. Así, en el cierre del año pasado sus autoridades advertían sobre un posible cierre de dos de los dispositivos, lo cual finalmente se concretará durante marzo, a días de que la institución haya cumplido 19 años.
El anuncio del cierre de dos nuevos dispositivos de atención a las adicciones -uno ambulatorio y otro residencial- se sumó a otros dos producidos a lo largo de 2020, en este caso con sedes ambulatorias. De esta manera, desde abril la comunidad terapéutica pasará a funcionar con un dispositivo ambulatorio (ubicado en Caseros 4552) y dos residenciales (Paraje San Francisco e Inti Huasi en el barrio Las Dalias). Hasta ahora, cinco sedes estaban en funcionamiento para dar cobertura a 180 usuarios (60 de ellos ambulatorios).
Lo que a finales de 2020 el presidente de la institución, Fabián Messina, advertía como posible finamente terminará siendo una realidad, y así fue comunicado por él mismo en una carta difundida esta semana en el marco de la celebración de los 19 años de la comunidad terapéutica.
“Un 25 de febrero de 2002 en la casa dada en comodato por la ‘Congregación Franciscana Misionera de María’ nos permitía recibir la primera paciente y así empezar a transitar un camino donde la mirada estuvo puesta siempre en poder acompañar a aquellas personas que necesitaban una ayuda. Niñxs, adolescentes, jóvenes adultos, familias destruidas encontraron en Posada posibilidades, un aspecto que resulta imprescindible en determinados momentos de la vida”, escribió Messina
Y expresó: “La institución fue mutando, creciendo, intentando mantener siempre un concepto nodular: ser un lugar de oportunidades. En este tiempo, la coyuntura nos hace sombra, donde el significado de cada 25 de febrero la alegría es el eje, hoy la tristeza empaña este hermoso día, porque este último año tuvimos que acotar ese valor tan preciado que es dar posibilidades y poder generar oportunidades” .
De esta manera, recordó que a lo largo de 2020 la institución tuvo que cerrar las sedes ambulatorias de España 4343 y de Córdoba 1397 y explicó que desde este lunes 1º de marzo cerrarán la sede de comunidad terapéutica “Antu Ruka” ubicada en el barrio Antártida Argentina, en tanto que el 31 de marzo harán lo propio con la sede ambulatoria de Córdoba 1379. Así, puntualizó que a partir del 1º de abril contarán con tres dispositivos: uno ambulatorio y dos residenciales.
Messina expuso la “tristeza” que ello representa para las y los integrantes de la institución y lamentó: “En un contexto donde la demanda es cada día mayor, donde la escases de oportunidades va en aumento, nosotros tenemos que tomar dichas decisiones debido a la inviabilidad de poder sostener una estructura como la que veníamos sosteniendo hace ya algunos años”.
Y volvió a reparar en que las razones “van más allá del contexto en términos de pandemia” sino que se centran en las las políticas de Estado y en las “decisiones políticas que durante años permitieron que este tipo de respuesta se vaya erosionando”.
Finalmente, destacó que pese a todas las dificultades buscan “seguir siendo una posibilidad para muchas pibas y pibes”.
