Desde la unidad barrial San Martín del Movimiento Evita en la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) – ubicada en Galicia 2691- informaron que sufrieron un nuevo robo, el octavo desde que comenzaron a funcionar, y piden ayuda para poder reponer lo perdido y poder seguir ayudando a las familias más necesitadas del barrio.
Susana Figueroa, referente del espacio e integrante del Movimiento Evita, explicó que en esta oportunidad quienes ingresaron rompieron una reja y se llevaron una gran cantidad de cosas del lugar -entre ellas comida- por lo que como consecuencia los daños y los faltantes peligra el funcionamiento de las diversas actividades que allí se realizan.
El espacio es merendero, comedor, roperito solidario, biblioteca popular, centro de salud, sede de formación en oficios y cooperativa de trabajo, huerta comunitaria, apoyo escolar, punto de encuentro y de acceso a la cultura y el deporte para la comunidad del Barrio San Martín. “Somos alrededor de 250 familias que participamos del centro cultural San Martín, y aparte de eso funcionan un montón de tareas. Rompieron todo el roperito donde nos preparamos para el invierno, para cuando empiezan las lluvias fuertes donde a la gente se le moja todo”, se lamentó Susana.
Y en ese sentido, la referente del espacio dijo sentirse “amargada” por lo sucedido: “Nos da mucha tristeza que lo hagan en este espacio comunitario. Robar está siempre mal, pero acá además seguro viene su mamá, o el primo, o el hermanito, viene a buscar una viandita, o una ropa seca; es muy triste. Rompieron todo, se llevaron todo: se llevaron la comida de los pibes. Nos da mucha amargura levantar los destrozos y sentir el vacío”.
Las actividades se sostienen con el compromiso de vecinas y vecinos solidarios: “Hay un grupo de más o menos 15 mamás que cosen, planchan y lavan si es necesario, para dejar toda la ropa en condiciones para esas emergencias”, detalló la referente, quien sumó que hay otro grupo que teje y prepara mantas para abrigar a los chicos cuando duermen “y reparten las mantitas en el centro de salud que montaron desde la organización”. Allí, también se realizan actividades deportivas y recreativas.
Tras lo sucedido, Susana confía en la solidaridad de las vecinas y vecinos de Mar del Plata para pasar el momento amargo y poder reconstruir lo perdido. Por eso, detalló que se necesita mobiliario, alimentos, tazas, ollas, artículos escolares y materiales para mejorar el cerramiento del espacio. Todo puede ser acercado a la sede de la institución, en Galicia 2691.