Secundaria N°71: sin gas ni agua, alumnos realizan un “frazadazo”
Cansados de no recibir respuestas, la comunidad educativa de la escuela rural de Playa Chapadmalal buscará visibilizar las condiciones en las cuales concurren a clases.
Alumnos, padres y profesores de la Escuela Secundaria N°71 del barrio Playa Chapadmalal realizarán este miércoles por la mañana un frazadazo para denunciar las condiciones en las cuales concurren a clases: señalan desde hace tiempo el edificio -que comparten con la Primaria N°24- no tiene gas, agua ni respuestas concretas del Consejo Escolar. “Pongan un caloventor”, fue la indicación de las autoridades.
Desde hace algunas semanas, el frío se instaló definitivamente en la ciudad y con él, emergieron reclamos desde distintas instituciones educativas del distrito, de distintos puntos de la ciudad, por las condiciones en que cursan. Ante la falta de respuestas de las autoridades, padres y alumnos encabezan las manifestaciones y los “frazadazos” ya son la forma más difundida para visibilizar.
En este caso, se trata de la escuela rural de Playa Chapadmalal, donde los alumnos, ante la falta de calefacción por tener calefactores inhabilitados, se ven obligados a tener jornadas reducidas de cursada. Además, tampoco tienen agua y un camión del Consejo Escolar carga día a día los tanques de la institución.
“El edificio hoy no tiene gas porque no están habilitados los calefactores y es una escuela rural a cuatro cuadras de la playa, y estamos a 6 de junio. El edificio tampoco tiene agua, porque sacaron las bombas, se las llevaron, pero después el problema se ve que no eran las bombas, era la perforación, y volvieron y así nos tienen”, describió Santiago, profesor de la secundaria, en diálogo con QUÉ Digital.
Según contó, se las arreglan para hacer horarios de cursada reducidos: “Los chicos entran 9:30, 9:40 hasta las 11:40 por el frío”. A su vez, en cuanto a la conexión de gas, contó que había pérdidas que fueron inspeccionadas por el Consejo Escolar. Con respecto al agua, describió: “Hay un camión que está yendo todos los días a llenar un tanque de donde se saca el agua. Cosa que consideramos que no es una solución”.
Ante esta situación, responsabilizó al Consejo Escolar: “No sé qué grado de importancia le darán ni sé cómo planifican. Pero si se dedican a esto, y estamos a 6 de junio sin gas es porque algo no anda bien. Acá lo que pasa es que hay un abandono, no sólo de este gobierno, sino de años, pero que ahora está saltando. Son varias las escuelas que están en esta situación” y criticó a la dirigencia sindical local de Suteba: “No apareció, no está. Hoy es la primera vez que hablan del tema”.
Asimismo, lamentó las respuestas que recibieron desde el Consejo Escolar, particularmente de la tesorera Claudia Píccolo: “Lo que nos mandó fue ‘calma y tranquilidad’ a través de la directora de la Primaria. Así que imaginate. Ellos lo que nos advierten es que acá ‘hay que cumplir plazos’. Y nosotros lo que advertimos es que acá esto ya se viene repitiendo. Esos plazos lo que hacen es que termines pasando el invierno así”.
Por último, cuestionó la decisión de las autoridades de dar clases a cualquier costo: “Encima, ellos te piden al continuidad pedagógica. No quieren la suspensión de clases. Por supuesto que nosotros estamos en desacuerdo. Imaginate lo que es ir ahí, a la mañana, a dar clases. Esto viene desde el año pasado y está toda la pila de notas entregadas al Consejo Escolar. La cuestión burocrática se cumplimenta siempre. Es la manera que ellos te la hacen estirar. Al día de hoy estamos trabajando en esta situación”, continuó.
Tras las idas y vueltas de las autoridades y con asambleas de por medio, la comunidad educativa realizará este miércoles por la mañana un “frazadazo” para visibilizar la situación: “La movilización la están haciendo los propios padres y los alumnos. Hay asambleas casi todos los días. Los chicos de la secundaria están queriendo mover, están queriendo mostrar lo que está pasando porque tienen frío y están enojados. La inspectora no pone la cara y le dijo al director que ponga un caloventor pero que no suspenda las clases”, graficó.
“Trabajar en esas condiciones es imposible. Que haya escuelas funcionando sin calefacción es una locura y lo peor de todo es cómo se naturaliza esto”, concluyó el docente con indignación, y también cansancio.
