Viernes 29 de marzo | Mar del Plata
11/10/2015

Supermercados chinos: denuncias, allanamientos y quejas

Luego de dos investigaciones formadas por trata laboral y reducción a la servidumbre, la Cámara que nuclea al sector asegura que se trata de “disparates”. Cómo llegan, viven y trabajan los inmigrantes orientales en la ciudad.

Supermercados chinos: denuncias, allanamientos y quejas
El supermercado Chino de Batán fue clausurado el 11 de septiembre (Foto: archivo / QUÉ Digital)

Luego de la formación de dos causas judiciales para investigar presuntos casos de trata laboral y  reducción a la servidumbre en dos supermercados chinos diferentes, por lo que una persona permanece detenida, la Cámara de Autoservicios y Supermercados Propiedad de Residentes Chinos manifiesta su queja por los procedimientos y asegura que se trata de “disparates”, que en ambos casos es muy grave lo que pasó” y sostiene que “no hay más” que irregularidades en la registración de  trabajadores.

Paula Urciouli es la titular de la Cámara que nuclea al sector hace once años. Según grafica, desde que eran cinco comercios de este tipo en la ciudad hasta hoy que son alrededor de 120 con la proyección de abrir nuevos en el corto plazo. Además, es abogada y actúa como defensora de un comerciante chino encargado del supermercado ubicado en Santiago del Estero casi Colón que se encuentra detenido desde el pasado 24 de septiembre por el delito de trata de personas con fines de explotación laboral contra un joven de 24 años.

Urciouli entiende que tanto esa causa como en la que está involucrado el supermercado chino de Batan son un “disparate”. Y sostiene su postura a partir de las condiciones en las que los inmigrantes llegan al país, se instalan y desarrollan su vida.

Como primer punto, asegura que en la comunidad “es costumbre” ir a vivir adonde trabajan.

En cuanto a la llegada de los ciudadanos chinos a Mar del Plata –como a otros puntos del país-, la abogada explica que la forma que se reitera con mayor habitualidad “se da a partir de un llamamiento de un familiar que ya está radicado: en los casos de los cónyuges, padres o hijos”.

“En China la situación económica y lo que es el trabajo está muy complicado desde hace años y ellos buscan salir de China y lo hacen muchas veces sabiendo que va a encontrar a sus familias en Argentina, y muchas veces no hablamos de su familia directa sino de primos, tíos, hermanos y salen sin la visa correspondiente para llegar a Argentina”, relata en base a su experiencia

“Si no vienen con visa no puede ingresar. Entonces muchas veces entran por espacios no autorizados”, puntualiza y agrega que también en numerosos casos hasta “recurren a ciertas organizaciones que traen a la gente”. En ese sentido, sostiene: “No hablamos de trata de personas si no de lo que sería un tráfico ilícito de inmigrantes: gente que se dedica a transportarlos. Que después esto tenga conexión con la trata yo no lo sé, digo lo que he visto”.

En la misma línea, suma: “He visto a mucha gente que está hoy radicada acá haber llegado por lugares no autorizados a encontrarse con sus parejas y sus hijos porque era la única forma de llegar. Y han permanecido en forma irregular mucho tiempo hasta que encontraron la forma de documentarse”.

La expansión de la comunidad china se ve en cada barrio donde la radicación de un supermercado o autoservicio se volvió moneda corriente con el correr de los años. “He visto el crecimiento de la comunidad china y llegan sin conocer el idioma, trabajan en supermercados, en un tiempo que no pasa los dos o tres años logran hacerse algún tipo de documentación y al poco tiempo están abriendo un nuevo supermercado con algún amigo, un primo  o un hermano”, cuenta Urciuoli y destaca que logran instalarse en lugares periféricos “con mucho esfuerzo”.

BATAN: DE LA TRIQUINOSIS AL HACINAMIENTO

SUPER CHINO ESCLAVO BATAN 04

(Foto: archivo / QUÉ Digital)

El pasado 11 de septiembre en el marco de un allanamiento realizado por los casos de triquinosis registrados en Batán, desde la AFIP solicitaron intervención a la Justicia a partir de haber encontrado a ocho trabajadores en condiciones de hacinamiento.

En la causa, el fiscal provincial Eduardo Amavet  pidió ser apartado a partir de considerarse incompetente por los delitos planteados referidos a la trata de personas con fines laboral.

En cuanto a esta investigación, Urciuoli cuestionó a las autoridades por el procedimiento y sus desencadenantes. Es que, según sostuvo, “solo se produjo la clausura del supermercados por 20 días por la existencia de cuatro empleados en negro”.

“Todas las personas, las nueve, además de ser familiares porque se trata de cuatro matrimonios y una chica que esta sin el marido con un bebe, están documentados, ya sea con residencia precaria –que termite posteriormente a tramitar el DNI- o con DNI extranjero, todo está bien”, señaló.

Y en cuanto a la situación habitacional, indicó que las nueve personas “viven en una vivienda con cinco dormitorios: uno por cada matrimonio y otro por la chiquita sola, en los cuales hay aire acondicionado, calefacción y cada uno tiene wi-fi con una laptop que es por donde se comunican con las familias”.

Se avasallaron derechos individuales y de su intimidad. Esto es lo que funcionarios de la AFIP llamaron hacinamiento y reducción a la servidumbre”, acusó y profundizó: “Era necesaria la clausura para tapar una situación de desinterés o de falta de trabajo en relación a la investigación, que fue deficiente en el caso de la triquinosis. Y era un papelón llegar a un lugar a allanar y que Senasa diga como dijo en el acta que no encontraba ninguna cuestión por la que tuviera que labrar un acta”.

Supermercado Chino Batan

Los ciudadanos chinos que viven en el supermercado de Batán.

“Algunos de ellos dijeron que estaban por la comida y el alojamiento, que eso desató supuestamente todo el mecanismo de la trata de personas. Pero que pasa, quién lo decía: la cuñada de uno de ellos que estaba viviendo ahí, por ejemplo. Hay que ver la cuestión idiomática también”, sumó en cuanto a algunos de los trascendidos de la causa.

SUPERMERCADO “PINO”: UN DETENIDO

El pasado 24 de septiembre se produjo un allanamiento en el marco de una causa por trata laboral en el supermercado “Pino”, ubicado en Santiago del Estero casi Colón, en el que la policía detuvo a los dos encargados del comercio y rescató a la presunta víctima, un joven de 24 años.

El caso comenzó a ser abordado por la Fiscalía Federal N°1 a cargo de Laura Mazzaferri a partir de una denuncia con identidad reservada. A partir de la gravedad del caso, con la intervención del Juzgado N°3 de Santiago Inchausti, se convocó a un allanamiento y, según se informó desde la fiscalía se encontró a la víctima en condiciones de precariedad y sin contar con las necesidades básicas satisfechas.

Por su parte, en el lugar se detuvo al propietario del supermercado y a su pareja, sospechados por ser los captores, y se los imputó por el delito de trata de personas con fines de explotación laboral. Luego, la mujer quedó en libertad por tener a su cargo a una nena de seis años.

No estaba contra su voluntad. Es una persona que vivía en un departamento de tres ambientes con los dueños del local”, sostuvo la abogada de los comerciantes.

“El chico llegó en abril en Argentina, pidió trabajo en el supermercado, y lo habitual en cualquier supermercado chino del país es que la persona que pide trabajo vive con los dueños, viven de donde trabajan”, argumentó.

Y en cuento a la causa, apuntó: “Sí puede haber ocurrido que no se haya adaptado al país y que no estuviera conforme de estar aquí, pero esto no autoriza a hablar a que estaba contra su voluntad y a que era víctima de trata. Es muy grave la acusación y es nula la prueba a mi entender”.

“Hay que entender cuál es la situación de una persona que viene de otro país a trabajar, muchas veces hacen sacrificios, pero la dignidad de la persona está a salvo”, entendió la representante legal.

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11/10/2015