Toma de terrenos en Las Heras: “Sólo queremos un pedacito de tierra para vivir”
Unas 30 familias empezaron a instalarse en tierras linderas al polideportivo municipal. “Muchos trabajamos pero es inalcanzable poder comprar un terreno”, expresan.
Malena tiene 22 años, día a día junta cartones con su pareja y paga un alquiler de $30 mil. Dice que ya no puede hacerlo por la realidad económica, que se le complica y no le alcanza y que muchas familias se encuentran en su misma situación. Este domingo a la tarde iniciaron una toma de terrenos en el barrio Las Heras y proyectan empezar a levantar casillas para poder tener su vivienda, mientras desde hace meses se suceden en la ciudad reclamos por falta de avances en programas para la construcción de viviendas sociales ante el déficit habitacional crónico que presenta Mar del Plata. “No queremos molestar a nadie, simplemente (queremos) un pedacito de tierra para poder vivir”, expresa la joven.
La ocupación de terrenos se inició este domingo y se mantenía hasta este lunes en las primeras horas de la tarde. Se trata de tierras linderas al polideportivo municipal del barrio Las Heras, sobre la avenida Fortunato de la Plaza y Rufino Inda, y están ubicadas enfrente de un gran asentamiento –denominado “La Comarca”– surgido en 2018 que, con el paso de los años, se fue ampliando y que hoy con 200 familias lucha para lograr constituirse como un “barrio” tras haber sido incluido en el Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap).
La toma, que incluye a unas 30 familias, se inició a partir de un acuerdo que fue creciendo entre vecinas y vecinos de zonas aledañas que desde hace tiempo buscan poder acceder a una tierra para vivir ante precios de alquileres que, por su realidad social y económica, se tornan inalcanzables.
“Nos pusimos de acuerdo entre vecinos, nuestro propósito es salir adelante, como saben la situación es muy difícil, muchos trabajamos pero es inalcanzable poder comprar un terreno”, expresa Malena que actualmente vive en el barrio Belgrano donde paga junto a su pareja un alquiler de $30 mil al que dice ya no poder hacer frente.
“Esto está desocupado, nadie lo está utilizando, nosotros de verdad lo necesitamos. Hay muchas familias con criaturas que no tienen un salario acorde”, señala.
La joven le cuenta a Qué digital que este domingo mientras estaban en la casa de unos familiares empezaron a ver la organización vecinal para iniciar la ocupación de los terrenos y decidieron sumarse: “Lo único que queremos es salir adelante, no queremos molestar a nadie, simplemente (queremos) un pedacito de tierra para poder vivir”.
Ante la llegada este domingo a la tarde a los terrenos, la Policía se hizo presente pero -según cuentan- tras un pedido de que se fueran del lugar ellos decidieron permanecer y pudieron “llegar a un acuerdo” al menos temporal de que no se avanzará con un desalojo.
“Pudimos organizarnos bastante bien, no hubo problemas; tratamos de ponernos de acuerdo entre los vecinos, todos queremos lo mismo, esto es una situación pacífica”, destaca Malena mientras avanza la delimitación de las tierras para cada una de las familias.
Mientras tanto, para las 16 esperaban poder tener algún contacto con la Municipalidad. Es que si bien el intendente Guillermo Montenegro anunció una conferencia de prensa para las 14 para referirse al tema hasta el momento, afirman, el único contacto que tuvieron fue a través de la Policía.
De cara a la continuidad de la toma, las familias están decididas a empezar a levantar sus casillas -mientras algunas permanecen en carpas- e incluso ya se organizaron para concurrir el miércoles a la empresa distribuidora de energía EDEA en busca de poder tramitar la llegada del servicio de electricidad a los terrenos.
