Trabajaba en un colegio y denuncia que la obligaron a renunciar
Liliana se desempeñó durante casi diez años en el Colegio IDRA en el área de limpieza, a través de MV Servicios. La acusaron de haberse robado dinero de la institución y no le pagaron la indemnización.
Liliana tiene 40 años y durante casi diez se desempeñó como parte del personal de limpieza y maestranza del Colegio IDRA, a través de la compañía MV Servicios, una empresa que brinda, justamente, servicios de limpieza e higiene integral para otras instituciones y particulares.
Pese a tener una “buena relación” con las autoridades del colegio –dice no haber tenido nunca un problema y cuenta que dos veces por semana trabaja en la casa de una de las hijas de la dueña, en el Bosque Peralta Ramos-, hace poco menos de un mes, Liliana se quedó sin trabajo: la encargada de MV Servicios la citó a su oficina, la llevó en un auto al Correo Argentino, llenó por ella el telegrama de renuncia y la obligó a firmarlo.
“Me acusaron de haberme robado un sobre, supuestamente tenían pruebas por las cámaras de seguridad. Me mandaron a llamar, fui y me hicieron renunciar. La encargada de la empresa me llevó en auto hasta el correo, me llenó el formulario y me hizo que firmara para mandar el formulario. No me dejaron decir nada, me acusaron directamente y yo pregunté por qué y me dijeron que fue por un sobre con plata, algo que no existió”, señaló la mujer de 40 años, hoy desempleada.
En diálogo con QUÉ Digital, la ahora extrabajadora relató la situación que le tocó atravesar y confió que pese a que los responsables de MV Servicios, tras obligarla a renunciar, le prometieron el pago de la indemnización y la liquidación correspondiente, solo le depositaron una parte, dado que en su recibo siempre figuró que trabajaba cuatro horas -es decir, media jornada- cuando en realidad su turno era de ocho y además se desempeñaba en horario nocturno.
“Me dijeron que al otro día me iban a pagar todo lo que correspondía, la indemnización y la liquidación de mi sueldo. Y eso no fue así. Esto pasó hace un mes y solamente me depositaron las cuatro horas en blanco que yo tenía, pero no el resto”, explicó respecto a lo sucedido tras su desvinculación del colegio privado.
En cuanto al motivo de su despido -desde la empresa a cargo de la limpieza la acusaron de haberse robado un sobre con dinero e incluso le dijeron que había imágenes de las cámaras de seguridad con las que cuenta la institución- Liliana se refirió a la actitud adoptada por las autoridades del colegio y a su vínculo con ellos: “Yo no pude hablar con la gente del colegio, porque en ese momento la dueña no se encontraba, estaba de viaje. Cuando volvió estaba con un problema de salud familiar, entonces nunca pude hablar con ella. Pero con la dueña tenía buen trato, incluso trabajo para su hija en el Bosque Peralta Ramos“.
En esa misma línea, y al ahondar en el motivo detrás de su despido, para la trabajadora su antigüedad es la clave del problema. “En estos años hubo casos de robos en el colegio y la dueña se encargaba de mostrarle a la empresa el video de lo sucedido. Entonces cuando pasaba eso, se le mostraba el video a la persona y a lo sumo se la reasignaba a otro servicio, pero a mí no me quisieron hacer eso. Y el video nunca lo vi, gente que trabaja ahí me dice que no hay nada. Entonces ahora todos me dicen que querían deshacerse de mí porque estoy por cumplir diez años, por el tema de la antigüedad”.
Para Liliana, como para muchos en tiempos de crisis, el haberse quedado sin su principal fuente de ingreso de un día para el otro no es algo menor, en especial teniendo en cuenta que durante casi diez años trabajó para la institución educativa sin ningún inconveniente. Por eso, ella hoy espera que la empresa MV Servicios se haga cargo, no solo por la desvinculación y el incumplimiento, sino también por la necesidad económica. “Quiero que me paguen lo que corresponde, por los nueve años que trabajé en el colegio. El tema acá es con la empresa”, completó.
DESPIDO INJUSTIFICADO Y DAÑO MORAL
Según pudo saber QUÉ Digital, el abogado que representa a la trabajadora ya presentó una demanda contra la empresa y el colegio por despido injustificado y daño moral. “Reclamamos la indemnización laboral, la demanda entra el lunes. Le mandamos carta documento a las dos partes, porque se los demanda en forma solidaria. El Colegio IDRA nos contestó negando todo, dicen que no la conocen cuando la mujer trabaja en la casa de familia de la hija de la dueña. Y esto no solo se lo hicieron a ella sino a otra compañera también”, detalló Pablo Tinca, representante legal de la trabajadora.
Al respecto, dijo que tras la desvinculación lo que se busca con las acciones judiciales es el pago de la indemnización por despido y el reconocimiento de los años trabajados por Liliana. “Nosotros ya hicimos los trámites en el Ministerio de Trabajo y la trabajadora pasó a cobrar el fondo de desempleo, porque de acuerdo al intercambio telegráfico, el Ministerio dictaminó que se trata de un despido sin causa”, advirtió.
