Tras el paro y la reunión con Montenegro, municipales aceptaron la oferta del gobierno
En asamblea, el sindicato que nuclea al sector decidió aceptar el incremento salarial del 30%, a concretarse en tres tramos. Este aumento se suma al 36% acordado en mayo.
Luego de la reunión que se concretó este lunes entre el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) y el gobierno municipal -encuentro que contó con la presencia del intendente Guillermo Montenegro- finalmente hubo acuerdo y se destrabó el conflicto: es que las y los trabajadores aceptaron la oferta del Ejecutivo, que implica un 10% de aumento a agosto, retroactivo a fin de mes, un 10% a septiembre y un 10% a octubre, con reapertura de las negociaciones en noviembre. Este incremento se suma al aumento del 36% que ya había sido acordado en mayo.
Este lunes el sindicato que agrupa a las y los trabajadores de las dependencias municipales llevó adelante una retención de tareas sin movilización. Fue, además, el segundo paro en menos de una semana en el marco de la reapertura de la paritaria como parte de la cláusula prevista en el acuerdo.
La medida de fuerza, además, se llevó a cabo a pesar de que estaba prevista una nueva reunión con autoridades municipales, encuentro que se concretó lunes con la presencia del intendente, tal como reclamaban desde el sindicato.
En ese marco, la oferta del Ejecutivo fue un incremento del 10% a agosto, retroactivo a fin de mes, un 10% a septiembre y un 10% a octubre, con reapertura de las negociaciones en noviembre. Y esa propuesta fue la que durante la tarde, en la sede del sindicato en Moreno y Chaco, fue analizada en asamblea y finalmente aprobada, por lo que el conflicto quedó desactivado y se espera la normalización en el funcionamiento de los servicios a partir de este martes.
La negociación paritaria se reabrió en agosto, tal como estaba previsto en el último acuerdo cerrado en mayo y como consecuencia del atraso salarial de las y los municipales: hasta julio la variación salarial acordada alcanzaba un 36% anual, algo que fue superado ampliamente por la inflación, que en julio llegó al 46,2%. Es por eso que para el gremio, a la espera de la inflación que se conocerá este miércoles, sus salarios están “un 20% debajo de la inflación”.
Entonces, como parte de la negociación, el sindicato había pedido en primera medida que se estableciera una recomposición del 20% para el mes de agosto y un 10% a sumar en septiembre. El gobierno, en cambio, propuso en primer término que esas cuotas entraran en vigencia en septiembre y noviembre, y el pasado viernes sumó porcentajes a agosto.
Hasta el momento, en lo que va del año, el gremio había acordado en mayo un aumento del 22% en dos tramos -15% con los salarios de mayo y 7% con los de julio- que se sumó a lo pactado previamente en marzo que implicó un aumento del 14% con relación a lo abonado en enero. De esta forma, con el nuevo aumento aprobado hoy, en el año acumulan un incremento salarial del 66%.
