Jueves 25 de abril | Mar del Plata
02/12/2018

Tuvo un accidente laboral, la echaron y no le pagaron nada

Lorena se desempeñaba para la empresa MV Servicios, que brinda servicios de limpieza e higiene para instituciones y particulares. Denuncia que quisieron obligarla a renunciar y ni siquiera le abonaron la liquidación.

Tuvo un accidente laboral, la echaron y no le pagaron nada
(Fotos: QUÉ Digital)

Lorena tiene 32 años y pese a haber gozado de buena salud prácticamente toda su vida, hace dos años convive con la depresión y las secuelas producto de un accidente laboral, la “mala praxis” de la Aseguradora de Riesgos de Trabajo (ART) y la decisión de la empresa para la que se desempeñaba –ante su negativa a renunciar- de despedirla alegando una “pérdida de confianza”. Hoy, aguarda los avances judiciales en el marco de una denuncia contra MV Servicios, ya que ni siquiera le abonaron la liquidación final.

Tras dar a conocer la historia de Liliana -de 40 años, quien se desempeñaba como parte del personal de limpieza y maestranza del Colegio IDRA, a través de MV Servicios y denunció que la obligaron a renunciar- Lorena le contó a QUÉ Digital su experiencia con la misma empresa, que brinda servicios de limpieza e higiene integral para otras instituciones y particulares.

Según relató, hace dos años, desde la empresa le asignaron tareas en Scania -en la zona de Ruta 88 y Vértiz- donde sufrió un accidente laboral: mientras bajaba rápidamente las escaleras, se dobló el tobillo y se cayó. Casualmente, esa escalera por la que circulaba “ya tenía el presupuesto para ser arreglada porque estaba rota” pero nadie se había hecho cargo de eso.

En ese momento comenzaron los problemas que culminarían, meses después, con el intento de la empresa de obligarla a renunciar, su posterior despido y la decisión de no abonarle ni la liquidación ni las remuneraciones correspondientes y el inicio de un camino judicial, todavía sin una resolución definitiva.

“Cuando me caí me enyesaron, después la ART me sacó el yeso y me curaron mal: el pie me quedó mal de por vida. Cuando me dieron el alta y me sacaron el yeso me volvieron a mandar a trabajar, pero rengueaba, no caminaba bien. Tuve un esguince de tobillo mal curado y por eso me quedó una discapacidad”, expuso la mujer de 32 años, hoy sin un trabajo fijo ni una reparación económica por lo sucedido.

MV SERVICIOS LIMPIEZA  (4)

De acuerdo a su relato, durante los meses que trabajó tras su lesión, Lorena sufrió maltratos por parte de sus empleadores, ya que pese a que los médicos le habían asignado tareas del tipo pasivas, la enviaban a servicios donde había escaleras, por ejemplo. “Y en los servicios se quejaban porque rengueaba. La supervisora me prohibía hasta renguear”, graficó.

En ese contexto, y al notar que lejos de mejorar su cuadro médico empeoraba, la mujer decidió acudir a un médico particular para tener otra opinión. Tras las primeras consultas, le ordenaron reposo por nueve meses, muletas e inmovilización del pie; sin embargo, el daño ya estaba hecho y las secuelas no pudieron revertirse.

“Después de estar nueve meses en reposo, me mandaron a otro servicio, pero yo ya no podía hacer las mismas cosas. Unos seis meses antes de despedirme me llamaron los dueños de la empresa y me invitaron a renunciar ‘cordialmente’, a lo que me negué rotundamente”, recordó Lorena sobre lo sucedido antes de su despido. En ese momento, no quiso firmar ningún papel y le dijo a los responsables de MV Servicios que si no querían que siguiera trabajando, debían echarla, porque ella no iba a firmar su renuncia.

“Y después me echaron, porque ellos te aprietan, te presionan. Me mandaban a lugares a donde no podía ir. Y ahí me echaron y me dijeron que el motivo era que habían perdido la confianza en mí; esos nueve meses de reposo ellos lo pasaron como que yo falté sin justificación, pero yo presenté los certificados, todo”, cuestionó.

 “FUE MUY INJUSTO LO QUE ME DIJERON; ESTUVE EN REPOSO EN MI CASA”  

Consultada respecto a su estado de salud y la postura de la empresa ante las secuelas en su tobillo, la trabajadora de 32 años lamentó la actitud asumida por los responsables de MV Servicios, quienes en el telegrama de despido se ampararon en la figura de la “pérdida de confianza” en relación al vínculo contractual.

En ese sentido, hablaron de la mujer despedida como una trabajadora “deficiente en sus tareas”, mencionaron cambios en su actitud, cuestionaron las inasistencias y la acusaron de no querer firmar sus recibos de sueldo e incluso “insultar a sus compañeros”. Pese a que en el mismo telegrama se comprometieron a poner a disposición de la extrabajadora su “liquidación final, certificación de servicios y remuneraciones”, eso nunca sucedió.

“Toda esta situación la tiene mi abogado, porque no me pagaron ni la liquidación del mes en el que me echaron y ni hablar de indemnización. Fue muy injusto lo que me dijeron, porque yo estuve en reposo en mi casa y ahora estamos en juicio, hace más de un año. Siempre llevé los certificados, durante tres años no tuve casi faltas”, puntualizó y detalló que las acciones judiciales son contra MV Servicios, la empresa Scania –donde ocurrió el accidente- y la propia ART.

Al respecto, Lorena dijo estar a la espera de los peritajes médicos y en cuanto a su situación actual, admitió: “Hoy yo no puedo caminar varias cuadras porque me empieza a doler. El dolor lo tengo, el problema lo tengo y me despidieron sin causa. Mientras tanto estoy haciendo changas y todo esto me generó un perjuicio personal y laboral, porque no le lo esperaba y sufro depresión: yo era una persona activa, hacía ejercicio, y ahora no puedo hacer nada”.

Ver más: , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

02/12/2018