“Lo que mal llamamos piropo es acoso y el acoso es violencia”
Un relevamiento realizado en la Facultad de Ciencias de la Salud y Trabajo Social de la Universidad de Mar del Plata indica que el 96% de las mujeres y disidencias sufren o sufrieron acoso callejero.
En el marco de la Semana Internacional contra el Acoso Callejero que se desarrolló del 7 al 13 de abril, el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Salud y Trabajo Social de la Universidad Nacional de Mar de Plata (UNMdP) realizó una encuesta entre la comunidad educativa, cuyos resultados son reveladores: más del 96% de las mujeres y disidencias encuestadas dijo haber sufrido algún tipo de acoso callejero, en tanto un 30% reconoció que al menos en una oportunidad, una persona le mostró los genitales en la vía pública sin su consentimiento.
En ese marco, desde el Movimiento Universitario SUR -que conduce el Centro de Estudiantes de la Facultad- manifestaron su preocupación -conocidos los datos en relación a la encuesta realizada entre más de 500 estudiantes- pero también destacaron la importancia y necesidad de sistematizar la información, para que las estadísticas reflejen la realidad.
“Comenzamos esta iniciativa a partir de las rondas feministas que se están llevando a cabo semanalmente en nuestra Facultad, donde surge la angustia y la necesidad de muchas estudiantes de erradicar la cultura del piropo para empezar a hablar de acoso callejero. Sabíamos que a muchas nos sucedía cotidianamente, pero verlo en porcentajes es alarmante”, expusieron desde el Centro.
Así, y en lo relativo a los resultados, de la encuesta realizada se desprende que más del 96% de las mujeres y disidencias encuestadas han sufrido acoso callejero desde edades muy tempranas -entre los 11 y 13 años-, que el 71% ha sido seguida en la calle por varones y que al menos el 30% ha estado en una situación en la que “una persona le mostró los genitales en la vía pública sin su consentimiento”.
Además, casi el 100% de las personas encuestadas reconocieron tomar “diversas precauciones” a la hora de caminar por la calle, ya sea salir en grupos, no salir en horarios específicos, ir hablando por teléfono o avisar por mensaje por donde están, entre otras medidas, por temor a ser acosadas.
En esta línea, desde la Secretaría de Género de la Federación Universitaria Marplatense (FUM) también manifestaron su preocupación y consideraron que es necesario “empezar a desnaturalizar estas cuestiones y empezar a visibilizar lo que vivimos cuando caminamos por la calle viniendo a estudiar, yendo a trabajar o esperando el colectivo”.
“Queremos caminar libres y no tener miedo a que nosotras o nuestras amigas no volvamos a nuestras casas. Lo que mal llamamos piropo es acoso y el acoso es violencia”, finalizaron.
