Otra vez un quinto juego, pero con una serie diferente
Quilmes está otra vez frente a un juego decisivo: debe definir este miércoles nuevamente como visitante en el Héctor Etchart de Caballito. Ya lo hizo en Bahía Blanca y sacó a uno de los candidatos.
Quilmes fue el único equipo de playoffs que ingresó con un record negativo, también fue el único que dio una vuelta serie en condición de visitante. Ya lo sacó a Weber Bahía en su propio Osvaldo Casanova. Ahora lo deberá hacer ante Ferro en el juego 5 que se disputará en el Héctor Etchart este miércoles si es que quiere jugar por primera vez en su historia por una final de conferencia.
Vayamos directamente a la lógica de juego. Quilmes es un equipo que ingresó a playoffs en su anteúltimo partido de Liga Nacional y esperando resultados. Además, fue el único que accedió a la post temporada con un record negativo de 26-30. Fue clave el antepenúltimo partido de etapa nacional ante Libertad, encuentro que los marplatenses se lo quedan por 75-72 jugando en el Islas Malvinas.
Esos fueron los primeros capítulos de la historia que empezó a escribir el Tricolor sobre el final de la temporada. Sólo esperaba resultados y la caída en el último encuentro con Peñarol no modificó nada. Pero para todo esto, el Cervecero ya había conseguido adjudicarse la sexta colocación en la Conferencia Sur para acceder como peor equipo a los playoffs de la temporada 2016/17.
Ahora bien, al cuadro final acceden los mejores de la temporada, y ese no era el caso de los marplatenses. Quilmes ingresó a playoffs, pero con un toque de suerte. Y esa suerte, junto con un poco de garra la traslado a la serie contra Weber Bahía, el elenco del Sepo Ginóbili que fue tercero en la zona sur.
No era la primera vez que Quilmes jugaba cuartos de final de conferencia. Los bahienses arrancaron con el pie derecho y ganaron los dos primeros partidos en el Osvaldo Casanova; y el Tricolor hizo lo propio en el Polideportivo. Quinto y decisivo en Bahía Blanca: no fue Vildoza, no fue Flor, fueron todos con un contundente 77-90 como visitante para acceder a una semifinal de zona.
Así empezaba una nueva historia, la primera tuvo final feliz, y esta puede que la tenga en Caballito este miércoles. La serie comenzó con una sorpresa y fue el batacazo de Quilmes tras la prorroga en el Héctor Etchart, en el que la visita superó a Ferro tras 45 minutos de juego y con 21 puntos de Luca Vildoza, aunque el mejor fue Maciel, ya que gracias a él, los marplanteses fueron a tiempo suplementario y allí lo ganaron (78-81), con mucho compromiso grupal.
Todo comenzó en Caballito con la victoria de los quilmeños, luego ganó Ferro en su casa. En la vuelta a Mar del Plata, la historia fue al revés, el Verde superó al local en el tercer encuentro y sobre el cuarto, el Tricolor estaba obligado a ganar, y lo hizo para nuevamente jugar un quinto y último partido. Será este miércoles. ¿Puede pasar el Cervecero? Si, claro. Pero para eso no deberá ser Vildoza, ni Flor, deberán ser Quilmes, un conjunto que fue creciendo en su juego una vez dentro de los playoffs.
