Como parte de la acción nacional que tendrá su epicentro en la Plaza de Mayo de la Ciudad de Buenos Aires,  la marcha federal universitaria convocada para el próximo martes 23 de abril tendrá su réplica en Mar del Plata con un paro y movilización que partirá desde el complejo universitario. Así fue definido por la Agremiación Docente Universitaria Marplatense (ADUM) en la continuidad de un plan de lucha contra el ajuste y el desfinanciamiento educativo impulsado por el gobierno de Javier Milei.

El plan de lucha de la comunidad universitaria de todo el país contra el desfinanciamiento concretado por el gobierno nacional sobre las casas de altos estudios, entre ellas la de Mar del Plata, tendrá la semana que viene una nueva jornada de reclamo y visibilización con una “marcha federal universitaria” convocada no sólo por los gremios de docentes sino también por las y los rectores que conforman el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN).

La actividad se desarrollará el próximo martes “en defensa del sistema universitario público argentino” y confluirá como punto central en la Plaza de Mayo de la Ciudad de Buenos Aires, aunque en Mar del Plata también tendrá su réplica.

En una asamblea realizada este miércoles, ADUM resolvió convocar a un nuevo paro para ese día en la Universidad Nacional de Mar del Plata y además llevar a cabo en la ciudad una nueva movilización, tal como ocurrió la semana pasada en conjunto con trabajadores no docentes y estudiantes.

En este caso, según adelantaron, la marcha se concretará durante la tarde y partirá desde el Complejo Universitario “Manuel Belgrano”. “Replicamos en Mar del Plata lo que ocurrirá a todo el país: docentes, nodocentes y estudiantes convocados a una gran jornada nacional de lucha por la educación pública”, señalaron desde ADUM.

La crisis en las universidades de todo el país se vincula directamente al ajuste implementado por Milei, por un lado por el congelamiento de las partidas destinadas a las instituciones a partir de la prórroga del presupuesto nacional 2023 y, por otro, por la pérdida de poder adquisitivo salarial de docentes y trabajadores teniendo en cuenta negociaciones paritarias con la Secretaría de Educación que para febrero y marzo se cerraron muy por debajo del índice inflacionario.

Esa doble situación, que atenta contra el sostenimiento del sistema educativo universitario público, ya ha derivado en distintas declaraciones conjuntas de autoridades universitarias y paros y otras medidas de protesta por parte de docentes y nodocentes que la semana que viene desembocarán en la “marcha federal”.