Cuerpos pintados, arte con aguja y tinta
Cerca de 8 mil personas pasaron por la sexta edición de la Convención Tattoo Mar del Plata que se realizó en el Torreón del Monje y juntó a unos 90 tatuadores locales, nacionales e internacionales.
Dos chicas pasean por la Costa en enero. Hay sol, hace calor y las chicas, en contra de toda recomendación de madre, van con remeras negras. Llevan el pelo pintado -una de violeta, la otra de rojo-, la cara maquillada con sombras y los brazos y las piernas llenos de tatuajes, de dibujos de flores, calaveras y algún dibujo que pudo haber salido de un disco de The Cure. Las chicas van por la Costa al cierre de la sexta edición de la Convención Tattoo Mar del Plata, que se realizó durante este fin de semana en el Torreón del Monje.
Este año, la Convención Tattoo Mar del Plata contó con unos 90 artistas locales, nacionales e internacionales, 50 stands de casas de tatuajes, artículos para tatuadores y perforadores y ropa. Además, bandas en vivo como Mal de Parkinson y Niki Lauda.
La Convención es un punto de encuentro de quienes llevan arte sobre la piel. De quienes deciden pintarse momentos, recuerdos, frases y canciones para no olvidar. Otros eligen tatuarse sentimientos, nombres, rostros, calaveras. Y muchos, o todos, se tatúan realmente cualquier cosa, porque todo está permitido llevar en el cuerpo de cada uno.
Según contó uno de los organizadores y responsable de la casa de tatuajes local Arte a Flor de Piel, Sebastián Lovera, este año se duplicó la concurrencia de la edición de 2015, con cerca de 8 mil personas.
Como cada año, también se premian a los stands de tatuadores por su trabajo, por diseño y por estilo. El domingo se podía ver sobre la mesa una cara de un demonio de madera que indicaba que ese artista había sido premiado. Una cara de demonio que indicaba que en ese tatuador uno podía confiar su cuerpo para recibir un dibujo permanente.
“El tatuaje es mi estilo de vida, no sé qué haría si no haría tatuajes”, dice Seba, mientras al lado una artista del body Paint realiza una obra sobre el escultural cuerpo de una mujer semi desnuda.
Mar del Plata, en enero es extraña. El mismo día puede pasar que jueguen Los Leones al hockey, Quilmes y Aldosivi. Que toquen Guasones, Alika y Stravaganza se presente. También, en enero sucede que hay un lugar donde las personas que encontraron en el dolor de una aguja sobre su cuerpo una manera de perpetuar una idea, un sueño, un sentimiento o un mensaje tengan un lugar para reconocerse entre calaveras, flores y demonios sobre la piel.
