La Whillington: ska y candombe, fiesta y reclamo social
La banda marplatense presenta “Frasco” su último disco grabado en los estudios porteños de El Abasto y editado de manera independiente.
La Whillington editó Frasco y está de fiesta. Y atentos todos cuando una banda que acostumbra ser una fiesta en cada show festeja. Con el disco nuevo bajo el brazo, el cantante del grupo, Pablo Ciambotti, no se achica: “Tenemos un material que nos representa, escuchás Frasco y parece que somos buenos en esto”.
La Whillington se presentará este sábado a las 21 en Casa Rock –Córdoba 2580- para lo que será la presentación oficial de Frasco. En este festejo, las primeras treinta personas que saquen entrada en puerta se llevarán un disco de regalo y, además, podrán escuchar la banda platense Cruzando el charco.
“Con Frasco la idea era en principio pasar la frontera que era Mar del Plata”, cuenta Pablo y admite que se les fue de las manos, con Marcelo “Balde” Spósito (ex bajista, letrista y fundador de Kapanga) como productor desembarcaron en los estudios Del Abasto para grabar el disco, bajo la supervisión de Álvaro Villagra.
-¿Cómo fue la experiencia de tenerlo a “Balde”?
-Fue un paso enorme. Todo a raíz de empezar a trabajar con Balde como productor. Hicimos 70 ensayos antes de ir al estudio. Todos los días, 4 horas de ensayo. Cuando el 17 de mayo fuimos al estudio éramos un reloj.
-¿Cómo se sintieron al llegar a uno de los estudios más importantes del país?
-Llegar a Del Abasto fue alucinante. Antes de nosotros salía Ciro y después entraba Iorio. Fue darnos cuenta que, si bien no teníamos un mango cuando fuimos a grabar, al entrar en esos estudios a grabar la diferencia con las bandas de Buenos Aires no es tal. Todos laburamos para sonar cada vez mejor, la banda tuvo esa posibilidad y el disco suena tremendo y las horas de grabación que utilizamos fueron las mínimas.
-La edición se les dilató bastante ¿qué pasó?
-En principio flasheamos, porque cuando estábamos en el medio de la grabación nos llegaban comentarios de que estaba bueno y te endulzan los oídos por todas partes y parece que vas a firmar el contrato de tu vida. Cuando terminamos el disco así como se abrieron las puertas se cerraron: lo que te pedían a cambio del contrato era el total del material por 50 años, otros te pedían plata para editarlo y venderlo en el exterior. Venían con muchas cosas de las cuales no sabíamos.
-¿Y qué hicieron?
-Fui a la UMI (Uníón de Músicos Independientes), averigüé cómo era la cosa y te vendían humo. Tuvimos dos contratos en la mano para firmar y decidimos subirlo a la página nuestra y regalar el disco. En principio soñábamos con entrar a un sello, pero era muy difícil y no se daba. Ahora tenemos la suerte de poder editarlo en formato físico para venderlo en los shows.
***
La Whillington tuvo un 2014 intenso, con el disco y con mucho show para poder solventarlo. Este año arrancaron con todo, fueron invitados a tocar en el Cosquín Rock, pero su fecha se reprogramó por el temporal y tuvieron que suspendarla, como también le pasó a Kapanga y a La Mississippi.
-Con tanta producción ¿pudieron mantener la esencia de la banda?
-Tal vez habría otras canciones más que yo hubiese metido, hubo una selección de temas. El disco está bien grabado y producido. Tal vez hubiese metido menos cosas, porque después defender el disco en vivo, con coros, teclados y demás, es más difícil. Para el próximo disco vamos a tener que aprender a manejar eso. Hacerlo más fiel al vivo nuestro.
-¿Con las letras? Siguen teniendo mucha fiesta, pero también aparecen letras duras.
-La banda tiene mucha letra social. “Ultra facho” es uno de los temas más crudo que tenemos, “Distinto” es muy irónico. No creo que se haya despegado mucho. Ya habíamos despegado mucho del candombe, la banda está más rockera, me gusta más así, yo antes hacía punk rock. Es una alegría poder hacer rock.
-¿Cómo les fue en este verano marplatense con tanto escenario gratuito?
-A nosotros nos cuesta tocar en Mar del Plata en fechas que no sea propias porque no tenemos espacio en ningún escenario de los que se armaron en la ciudad. En la temporada tocamos en Santa Clara y Mar de Cobos. Este verano estuvo lleno de espacios políticos, pero tenemos temas que no les gusta a nadie que toquemos. Nosotros tocamos mucho para asambleas y agrupaciones sociales y obviamente que no nos van a llevar a tocar a otros lados.
-¿Y si los invitaran irían?
-Tocamos lo mismo, sí. En un festival nos habían invitado a tocar, pero nos dijeron que “Ultra facho” no lo podíamos hacer y nos fuimos. Dos veces nos pasó.
-Entonces decís que no los llaman porque sus temas molestan.
-Pero es lógico, Pulti no me va a llamar a mí si toco temas que no le sirven. Tal vez hay bandas que están más vacías de contenido social, no digo que sea malo o bueno cada uno elige su camino, eso va a hacer que tengan más shows. Pero bueno, este es el camino que elegimos.
El sábado La Whillington presenta Frasco y está de fiesta. Como invitados vienen desde La Plata Cruzando el charco, a quienes recibirán con un asado y un partido de fútbol. “La Whillington está invicta en Mar del Plata”, dice Pablo y se ríe, porque mientras todos jueguen él estará haciendo el fuego, para empezar a calentar la fiesta.
