Asaltos a escribanías: detienen al último prófugo de la banda
Se trata de Diego Salvador Rodríguez, de 36 años, quien fue detenido en las últimas horas tras un allanamiento. Está acusado de cometer, junto a otras cuatro personas, al menos ocho robos a estudios profesionales.
Diego Salvador Rodríguez, el último de los hombres que se encontraba prófugo y está acusado de formar parte de la banda que se dedicaba a cometer asaltos a estudios profesionales, fue detenido en las últimas horas tras un allanamiento. Al igual que a sus compañeros, se le imputan ocho robos agravados a estudios profesionales.
Según pudo saber QUÉ, con la aprehensión de Diego Salvador Rodríguez, de 36 años, suman cinco los detenidos, todos acusados de integrar la banda que fue desbaratada en 2015 y que está acusada de cometer ocho robos a escribanías, estudios jurídicos y contables, hechos en los que fueron sustraídos más de $700 mil.
En concreto, Rodríguez fue apresado por personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) en las últimas horas, tras un allanamiento que se realizó en calle 69 entre Cerrito y Alvear y quedó a disposición del fiscal a cargo de la causa, Fernando Castro.
La banda había sido desbaratada en febrero tras la detención de tres hombres –Javier Ludueña, Lucas Montefusca y Ezequiel Elías- quienes se negaron a declarar y luego fueron alojados en Batán. Algunos meses después, la Justicia logró dar con Oscar Barrientos, considerado el líder de la banda, quien estaba prófugo y se entregó en Tribunales.
A la banda se le imputan ocho robos –inicialmente fueron seis pero con el correr de la investigación se probaron más- en diferentes estudios contables, jurídicos y escribanías de la ciudad que desde septiembre de 2014 hasta enero de 2015. El monto total de lo robado asciende a los $700 mil, además de computadoras, teléfonos celular y otros objetos de valor.
El accionar de la banda era siempre el mismo: los delincuentes entraban como clientes a estudios profesionales en un horario cercano a su cierre, generalmente cerca de las 14. Luego,exhibían sus armas, amenazaban a clientes y personal, y huían con el botín en algún auto particular.
