Improvisa2: “Somos fieles al público de Mar del Plata”
Gabriel Gavila, Mariana “Cumbi” Bustinza y Tomas Cutler conversaron con QUÉ Digital sobre sus quince años de temporadas ininterrumpidas. Cábalas, recuerdos y mucho humor.
Quince años atrás los veranos en Mar del Plata eran intensos, el stand up no estaba todavía muy instalado y en la loma de la avenida Colón había un museo de caracoles, con un acuario y una hermosa sala teatral donde un grupo de Buenos Aires subía al escenario e improvisaba escenas en base a lo que proponía el público a través de consignas.
Pasaron 15 temporadas de aquella osadía que asumieron Gabriel Gavila, Mariana Cumbi Bustinza y Tomás Cutler, pero la improvisación y el humor siguen vigentes en un trío que se complementa muy bien, con energía y humor, y que regresa cada verano a hacer temporada. “Con el tiempo forjamos un público muy fiel en esta ciudad, amigos , gente que nos sigue… nos bancan mucho acá. Y sentimos una necesidad grande de devolver a esa fidelidad y por eso volvemos y volvemos. Somos fieles al público”, explicaron los Improvisa2 para QUÉ Digital.
En el Centro de Arte RadioCity+RoxyComedy+Melany, de San Luis 1750 y hasta fines de febrero, todos los jueves, viernes y sábados a la medianoche, la compañía propone un espectáculo de humor basado en improvisaciones que parten de consignas que emite el público presente. A raíz de esas oraciones, frases o palabras sugeridas por los y las espectadoras, el trío improvisa historias y personajes al instante.
Además durante la temporada, el grupo redobló la apuesta con “Ritmos Latinos”, bajo la dirección de Sebastián Godoy, la obra que encarnan Bustinza, Cutler y Gávila sin dudas deviene en una interesante crítica a los valores más tradicionales y reaccionarios de la sociedad argentina. Las entradas están a la venta en la boletería del teatro, en Plateanet o con descuento en las redes sociales de la compañía y las funciones tienen lugar los martes a las 22 en el Teatro Melany, San Luis 1750.
Improvisa2, en su temporada 2015
– Quince años es un lindo número, sobre todo cuando hablamos de temporadas ininterrumpidas ¿qué recuerdan de los comienzos?
– (Gabriel Gavila) Mis recuerdos más fuertes son de trabajar muy duro. Algo que nunca cambió. El primer verano en mardel no nos conocía nadie y salimos a buscar el público literalmente. Por fortuna las cosas salieron bien. El trabajo duro siempre da buenos resultados.
– ¿En sus inicios tuvieron alguna cabala que siguen hoy en día?
– Tenemos muchas… muchísimas cábalas .Es mas algunas son exclusivas de Mardel. Hacemos dos gritos de guerra en el escenario, es clave que toda persona que esté presente en la sala suba y lo haga con nosotros. Técnicos, acomodadoras, etc. Luego hacemos otros dos gritos en el camarín. Prendemos muchos sahumerios. Yo prendo palo santo. Y podría seguir porque son muchas, de verdad.
– ¿Por qué eligieron Mar del Plata para hacer temporada y qué los enganchó a quedarse y persistir?
– Básicamente nos gusta la playa, en lo personal soy fan del mar. El sueño era combinar teatro y playa y sucedió. Con el tiempo forjamos un público muy fiel en esta ciudad, amigos, gente que nos sigue… nos bancan mucho acá. Sentimos una necesidad grande de devolver esa fidelidad y por eso volvemos y volvemos.
– ¿Cómo surgió la idea de hacer “Ritmos Latinos”?
– (Mariana Bustinza) “Ritmos Latinos” surgió como otra idea sobre esto que venimos haciendo de estrenar obras con dramaturgia propia que no son improvisadas y lo remarco porque cuesta mucho escribir en grupo y “Ritmos Latinos” la escribimos entre los tres, junto a Seba Godoy. La idea en sí del gimnasio de las tres señoras de la clase de ritmos latinos de la guerra surgió como siempre a partir de cosas reales, cosas que nos pasaron o que vimos y nos interesaron. En este caso el mundo de los gimnasios y las clases que son para señoras
– Y además, hubo que dejar a un lado la improvisación y trabajar con un director ¿Eso fue complejo?
– Más allá de que hicimos una dramaturgia, empezamos con improvisaciones y en base a eso fuimos escribiendo, nuestra asistente de dirección Vanina Caballito fue parte importante de este proceso, ya que ella anotaba todo lo que pasaba en los ensayos. Con respecto a Seba Godoy por mi parte fue muy placentero trabajar con él. Me resulta lindo entregarme a la dirección de alguien y creo que a todos en algún punto nos pasa igual.
– ¿Cómo manejan sobre qué hacer humor y sobre qué no?
– Con respecto al humor, sobre esto de que no se puede hacer humor con ciertas cosas no estoy de acuerdo: se puede hacer humor con lo que sea depende de cómo esté hecho. Seguramente cuando uno hace humor puede pasar que ciertas personas se sientan ofendidas. Cuando uno hace un gag o un chiste piensa que del otro dado la gente tiene el mismo código o está compartiendo la misma broma sobre algo, pero a veces no y bueno, a bancársela. No porque a veces el público en su totalidad no comparta alguna humorada no signifique que por eso no podamos hacerla o que esté mal.
-Este power trío se debe haber convertido en una familia prácticamente ¿Cuál es el secreto para perdurar en el tiempo?
– (Tomás Cutler) No hay secreto, nos une la pasión por lo que hacemos, eso hace que nos elijamos por sobre nuestras individualidades pero sin perderlas. La impro y sus valores ayudan mucho (aceptación, escucha, propuesta) al desarrollo de buenas costumbres para trabajo en equipo. No creemos en los talentosos, sí en los que utilizan su talento para potenciar al equipo. Improvisa2 sentimos que es una usina teatral donde podemos volcar todas nuestros colores para poder crear obras de arte en equipo. Ya tenemos varias obras de texto en nuestro haber y nos seguimos autoconvocando para otras nueva. Sin ir mas lejos en este 2019 estrenaremos en Capital la nueva.
– Actualmente el uso de la palabra y el lenguaje está mutando bastante ¿Lo fueron incorporando?
– Creemos que en este tiempo se están visualizando más esos cambios porque vienen aparejados de otros con mucha fuerza, pero si analizamos el lenguaje fue evolucionando siempre junto a la sociedad, se va a ir incorporando naturalmente. Lo importante es no juzgarlo ni hacerlo ajeno. Es momento de escuchar, de dejar fluir. El lenguaje inclusivo -como se lo llama- puede ser perfecto al momento de interpretar a un adolescente. Es muy teatral y característico.
