El animador negó haber tocado a las nenas
El hombre de 30 años declaró ante la fiscal de la causa y aseguró que nunca estuvo fuera de la vista del resto de los adultos durante la fiesta. Permanecerá alojado en el Penal de Batán acusado de “abuso sexual agravado”.
El animador y fotógrafo de 30 años que fue detenido en un cumpleaños negó haber manoseado a los nenas y argumentó que en todo momento estuvo a la vista del resto de los adultos presentes en el salón de fiestas. La fiscal pidió que la aprehensión se convierta en detención.
El individuo que permanece alojado en el Penal de Batán en calidad de aprehendido fue trasladado esta mañana a Tribunales para prestar declaración ante la fiscal de la causa, María Isabel Sánchez. Durante alrededor de una hora realizó su defensa junto a su abogada particular, Patricia Perelló, y negó haber realizado algo impropio durante el cumpleaños al que asistían nenas de entre ocho y nueve años.
En concreto, según informaron desde la fiscalía, argumentó que durante toda la fiesta estuvo a la vista de los padres y de todos los adultos que estaban presente en el salón.
El acusado permanecerá alojado en el Penal de Batán hasta que la Justicia de Garantías determine si da lugar o no al pedido de conversión de aprehensión en detención solicitada por la fiscal.
Con el correr de las horas fue modificada la calificación de la causa y así al hombre se le imputa “abuso sexual agravado”. Para eso la fiscal tiene en cuenta que el acusado tenía el rol de guardador del grupo de las niñas en ese momento.
Fueron siete las denuncias que se recibieron en la Comisaría de la Mujer y la Familia y que forman parte de la misma causa que lleva adelante la fiscal Sánchez.
Los próximos pasos de la investigación consistirán en que las nenas sean entrevistadas por una psicóloga de Asistencia a las Vïctimas para evaluar si están en condiciones de declarar en Cámara Gesell. Paralelamente, también se realizará una evaluación psicológica del acusado.
Por otro lado, los investigadores requerirán que se realice una inspección ocular en el salón de fiestas para determinar cuáles eran los ángulos de visión que tenían los presentes sobre la ubicación del acusado.
