Desde la CTA exigen un paro nacional “en unidad”
José Rigane, secretario adjunto de la central y dirigente de Luz y Fuerza, señaló la necesidad de agregar a las movilizaciones del 4 de abril un paro general contra el gobierno.
El próximo 4 de marzo la Confederación General del Trabajo (CGT) encabezará una jornada de lucha “en defensa de la industria y el empleo”, pero desde Mar del Plata insisten en que, a las movilizaciones y actos que se llevarán a cabo, es “necesario” sumarle un paro general contra un gobierno que “solo atiende al FMI”.
Las palabras son de José Rigane, secretario adjunto de Central de Trabajadores Argentina (CTA Autónoma) y dirigente de Luz y Fuerza, quien se expresó ante la convocatoria que lanzó la CGT, cuestionada por diversos sectores en el último tiempo ante la “pasividad” que maneja en medio de la crisis.
En consecuencia, Rigane habla de un paro nacional “necesario”. “La iniciativa gubernamental no tiene reparos en seguir golpeando severamente a los sectores populares y a los y las trabajadoras. Creemos que no alcanza con una movilización y un acto, el paro nacional en unidad tiene la contundencia que se necesita para este momento”, aseguró.
Llamativamente, el último paro general que las principales centrales obreras le hicieron al gobierno fue hace seis meses, el 25 de septiembre, con la fuerte devaluación de los últimos días de 2018 en el medio, además de los conflictos en educación y otros sectores del Estado, que ya en 2019 -año electoral- empiezan a asomar nuevamente.
Rigane calificó las políticas que lleva adelante el gobierno a nivel nacional y la situación actual como “desastrosa”: “El ajuste cada vez se profundiza más y ya tiene indicadores sociales y económicos que son demostrativos de la hecatombe impuesta: incremento de la pobreza, de la desocupación, de la subocupación, de la indigencia y la pérdida del poder adquisitivo y la depreciación del peso, son algunos, entre otros, de los datos más apremiantes”, agregó.
En consonancia, Rogane asegura que desde la CTA Autónoma ya empezaron las gestiones y conversaciones con otras fuerzas políticas, gremiales y sociales para discutir la posibilidad de realizar una medida de tal magnitud, sensiblemente diferente y activa a la que propuso la CGT: “Esa es la media que debemos tomar frente a un gobierno que solo atiende al FMI y continúa impulsando el ajuste en beneficio a los que concentran poder y riqueza”, completó.
