Puerto: el desarrollo del barrio más emblemático de la ciudad
Ubicado en la zona sur, alberga a miles de familias, que en su mayoría se dedican a la actividad portuaria. Con un fuerte vínculo con la religión y el pueblo italiano, enfrenta los desafíos del crecimiento urbanístico y poblacional.
Más allá de que el sector portuario -en su totalidad- alberga a numerosos barrios por la extensión territorial que representa, lo cierto es que el barrio Puerto es, por excelencia, el espacio más emblemático de la ciudad, con un fuerte vínculo con la religión y el pueblo italiano y un gran desarrollo urbanístico y poblacional.
Ubicado en la zona sur, comprende el radio delimitado desde Avenida de los Trabajadores por Juan B. Justo hasta Cerrito, desde Cerrito hasta 12 de Octubre, desde 12 de Octubre hasta Edison, desde Edison hasta Vértiz y finalmente desde Vértiz hasta Avenida de los Trabajadores y Juan B. Justo.
La Asociación de Fomento del Puerto es la más antigua de la ciudad: fue fundada en 1937, y con el correr de los años fue cediendo jurisdicción a nuevos barrios a partir, justamente, del crecimiento urbano. “La gente que vive acá en el puerto depende, en su mayoría, de la actividad portuaria”, precisó el titular de la entidad vecinal, Xavier Marcone , respecto a las características de la zona.
En ese sentido, el presidente de la asociación de fomento -que en octubre de 2015 rescindió el contrato de contraprestación de servicios debido a la deuda de 22 meses contraída por el Municipio– consideró que si se tiene en cuenta la zona de acción “no hay necesidades primarias insatisfechas”, a excepción de casos puntuales.
En ese sentido, y pese a que la zona en sí presenta características y problemáticas diferentes -en especial al alejarse de los centros que nuclean a la población, como la calle 12 de Octubre o las avenidas principales- por el barrio Puerto pasan 16 líneas de colectivo, que garantizan la conexión con el resto de la ciudad: “En el Puerto, específicamente, siempre hay un colectivo”.
En cuanto al estado de las calles, aunque la obra de asfalto se desarrolló, el bacheo no se realiza desde hace años. “Hay un problema que tiene que ver con que esto es piedra y hay mucha vertiente, además de muchos camiones de gran porte por las fábricas”, señalaron desde la sociedad de fomento.
TRABAJO EN RED, RELIGIÓN E HISTORIATeniendo en cuenta, justamente, lo extenso del territorio por fuera del barrio, la Asociación de Fomento del Puerto trabaja en conjunto con otras entidades vecinales en lo que hace a las problemáticas de la zona. Actualmente, uno de las temáticas que se abordan tiene que ver con el estado del Centro de Salud Nº2 y su posible traslado.
“Todos los que estamos involucrados nos reunimos con el secretario de Salud, Gustavo Blanco, y nos dicen que hay que hacerlo de vuelta. La idea sería dejar ahí la guardia eventualmente, trasladar los consultorios al SOIP y hacer una construcción nueva”, precisó el titular de la entidad y detalló que el Centro de Salud Nº2 es el único efector de salud público, pese a la presencia de numerosos consultorios privados.
A su vez, y en cuanto al a educación, Marcone resaltó la presencia de numerosas escuelas públicas, aunque hizo hincapié en el hecho de que gran parte de la comunidad elige establecimientos religiosos, como la Sagrada Familia o la Inmaculada Concepción. “En nuestro barrio, por la ubicación, tenemos un buen aprovisionamiento, el tema es cuando uno se aleja un poco, ahí surgen los problemas”, graficó.
Teniendo en cuenta la importancia del Puerto para la ciudad de Mar del Plata y la historia detrás de su fundación, los vecinos de la zona tienen un fuerte apego con el mar, el pueblo italiano y, en muchos casos, la religión.
“Hace unos quince años la sociedad de fomento comenzó a inclinarse hacia lo cultural y por eso fundamos el Museo del Hombre del Puerto Cleto Ciocchini, que es nuestro, funciona dentro del Centro Comercial”, recordó Marcone, quien destacó la importancia de este espacio, que resguarda la historia del hombre que, años atrás, se instaló en la zona sur tras ser echado del centro.
“Hoy en día tenemos unas catorce congregaciones que efectúan sus procesiones como si estuvieran en sus lugares de origen; se hace igual que en Italia, se mantiene la tradición y eso es algo muy característico del barrio”, sumó, sobre la vinculación de la población con la religión y los orígenes italianos.
SEGURIDAD, POLICÍA Y USURPACIONESEn el barrio Puerto existe un asentamiento precario, que acompaña la vía férrea que va desde la zona de San Salvador hasta la terminal de cargas. “Se calcula que unas dos mil familias están instaladas en esa zona, lo que genera que no haya conectividad por esa vía; ese es un problema grande”, sostuvo el titular de la Asociación de Fomento del Puerto, respecto a la villa.
En ese sentido, Marcone hizo referencia al impacto de esta situación y a la proliferación del consumo de drogas. “Hace 20 años se iba a buscar gente ahí para trabajar, pero el tema de la droga generó otra situación. Cada vez que hay un robo se meten ahí y hay zonas que son muy peligrosas”, apuntó.
Al respecto, dijo que pese a la presencia policial –en especial de la Policía local- “nadie entra en la villa”. “Por eso hay que trabajar con la prevención, pero ese es un tema de largo plazo”, consideró.
Por otro lado, el titular de la entidad vecinal reparó en la existencia de numerosos asentamientos precarios, vinculados con la necesidad de vivienda. “En la zona sur en la década del ‘60 se hicieron muchos loteos: se compraban lotes, se escrituraban muchos, pero quedaban ahí; entonces nació el negocio de la usurpación y la cesión de boletos de compraventa”, relató y remarcó que a partir de esa situación mucha gente comenzó a instalarse en terrenos desocupados, que actualmente se encuentran usurpados.
La relación entre el Club Aldosivi y el Puerto es innegable y no necesita explicación; alcanza con recorrer las calles y observar, en cada pared o rincón del barrio, alguna pintada alusiva. Y en ese sentido, desde la sociedad de fomento consideraron que el Club “es parte de la cultura” del sector portuario. Incluso un dato que no muchos saben tiene que ver con el origen del nombre de la entidad deportiva
“El puerto fue construido por la Sociedad Francesa de Trabajos Públicos en 1913. En esa época se usaba la teletipo y la clave utilizada eran las dos primeras letras de los cuatro dueños de la empresa (AL-DO-SI-VI). Ahí nació el Club, que no es solo un espacio deportivo, sino que es parte de nuestra cultura”, apuntó el referente de la asociación vecinal.
