“Queremos transmitir”, la lucha de La Revuelta para salir al aire
El Enacom le debe desde el año pasado dinero por haber ganado un subsidio. Este jueves realizaron una protesta, una radio abierta y entraron al edificio a exigir respuestas. Les prometieron el pago en tres semanas.
El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) le había pedido tiempo a los integrantes de la radio comunitaria La Revuelta (107.5 mhz) para pagarles una deuda que iba a ser destinada a equipamiento e infraestructura . Tiempo para auditar a todos los medios que ganaron un Fomento Concursable para Medios de Comunicación Audiovisual (Fomeca) durante la gestión anterior. El tiempo pasó, las auditorías teóricamente se realizaron y el dinero no llegó, por lo que otra vez tuvieron que ir hasta las puertas del lugar a reclamar, a hacer ruido, a pedir lo que les corresponde.
Este jueves a la mañana los integrantes de La Revuelta fueron otra vez hasta las puertas del Enacom, La Rioja 2449, para reclamar por el dinero para equipamiento e infraestructura por haber ganado un Fomeca que les deben desde el año pasado. “Queremos transmitir“, era el mensaje. Transmitir, salir al aire, pluralidad de voces, libertad de expresión, todas consignas que tan bien suenan, pero que tanto cuestan.
De la protesta en la puerta del Enacom pasaron a una radio abierta dentro del edificio. A transmitir música y a exigir respuestas. Autoridades nacionales del Enacom se comunicaron con los integrantes de La Revuelta y les pidieron más tiempo, esta vez tres semanas.
“Nos dijeron que de acá a tres semanas nos van a pagar el dinero, que ya devaluó y que por la demora no sabemos si nos va a alcanzar para comprar todo”, dicen desde La Revuelta.
La Revuelta es un proyecto de comunicación comunitario que nació hace unos 5 años, impulsados por la organización social Votamos Luchar. Comenzaron a preparar un estudio de radio en Alberti al 200, desde donde transmitieron de manera precaria por el 107.5 mhz. Sin embargo, tras ganar el Fomeca, dejaron de transmitir para preparar la radio de manera profesional, pero al no haber cobrado el dinero no pudieron volver al aire.
