El cambio no le dio aire
Con la presentación de Walter Otta como entrenador, Unión volvió a hacer un aceptable partido pero no pudo ganar. Igualó 1 a 1 frente a Los Andes, acumula 11 juegos sin halagos y sigue en zona de descenso.
Esta vez, técnico que debutó no ganó. El cambio de aire no surtió efecto inmediato. En la presentación de Walter Otta como entrenador, Unión no pudo ante Los Andes e igualó 1 a 1 al cabo de la fecha 34 de la B Nacional, por lo que continúa en zona de descenso.
En cuanto al juego, no hubo variaciones en relación al rendimiento con Gustavo Noto. Si fue efectivo en ataque y en el único error que cometió lo pagó caro, con el dudoso penal sancionado por Fernando Espinoza, que Noriega cambió por gol y sentenció el empate. Con este resultado, el “Celeste” acumula 11 partidos sin ganar y sigue en zona de descenso.
Fue bueno el primer tiempo de Unión. El conjunto marplatense tuvo mayor posesión de la pelota en todo el período y las mejores opciones de gol. Y salvo por un gran desborde de Galeano que terminó con una “pifia” de Noriega a los 2 minutos, la defensa no pasó sobresaltos.
La buena tarea de Mazzina y Alesandroni cortó los circuitos de juego de Los Andes, que en defensa tuvo desacoples, los cuales permitieron los avances profundos del “Celeste”, siempre propiciados por Visser y Ramírez, con la participación de Castro y las definiciones de Albarracín.
El delantero puntano metió dos buenos cabezazos, pero Gagliardo despejó excelente en ambos. Y también estuvo muy cerca de definir tras una excelente maniobra individual de Castro, pero Martínez lo evitó con lo justo.
Apenas 55 segundos tardó Unión en romper el marcador. Mazzina cortó en la mitad de la cancha y metió un pase frontal, ante una defensa saliendo, y Ramírez encaró en soledad, eludió a Gagliardo y definió preciso.
De ahí en más, por la necesidad del “Milrayitas” y el retroceso propio, Unión fue acorralado. Sin embargo, el conjunto visitante no tuvo claridad. La situación estaba clara: el equipo de Otta resignó la tenencia, priorizó el orden y la resistencia y esperó el error defensivo de Los Andes, que desde los 15 minutos puso cuatro delanteros.
Unión estaba replegado, pero aguantaba bien los embates de los visitantes. Hasta que en un centro desde la derecha para la llegada de Córdoba, pero Cucco lo tomó de la camiseta y el árbitro no dudó en sancionar penal. Y Noriega no falló.
En el final ambos fueron por el triunfo, pero con más ganas que fútbol. Abundaron las desprolijidades y no pudieron sacarse ventajas. Unión se quedó con las ganas de volver al triunfo, una cuenta que creció a once juegos consecutivos sin halagos.
