Acampe en Desarrollo Social, día 11: “El trabajo es el que resuelve tanta pobreza”
Las organizaciones encabezadas por Nueva Esperanza cumplen una nueva jornada de permanencia entre los pedidos de más trabajo y el malestar de vecinos.
Las organizaciones sociales y cooperativas encabezadas por Nueva Esperanza que se encuentran acampando desde el pasado martes fuera de las instalaciones del Centro de Referencia del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación ubicadas en el Espacio Unzué, cumplieron este viernes el undécimo día de permanencia, entre los pedidos de más trabajo y el malestar de vecinos.
La manifestación iniciada en primer medida por la necesidad de asistencia directa y alimenticia y apertura del programa Potenciar Trabajo para centenares de familias, continúa y de manera casi exclusiva en torno a las negociaciones por fuentes laborales.
Puntualmente, desde el Ministerio de Desarrollo Social, tras haber ofertado en primer término 50 puestos de trabajo, luego ampliaron su oferta a 100, y allí permanecen estancadas las negociaciones con las organizaciones que reclaman trabajo para al menos unas 500 familias.
Previamente habían acordado ayudas directas a los comedores y merenderos de las organizaciones con asistencia monetaria, pero también con ropa y mercadería. “Todo bien con las ayudas pero necesitamos resolver lo del trabajo porque entendemos que la principal necesidad es esa”, dijo al respecto Paola Tournoud.
Sin éxito, este medio intentó comunicarse con el titular del Centro de Referencia del ministerio, Diego García, para conocer los pormenores de la negociación. Incluso, desde el acampe aseguran que por declaraciones mediáticas de sus referentes, el diálogo en las últimas horas se cortó.
“Trabajo, trabajo, trabajo. Queremos eso y no la entienden. Re agradecidos porque voluntad de asistencia hay, pero en nuestro caso es el trabajo el que resuelve tanta pobreza y angustia. Estos vecinos son trabajadores desempleados en medio de la pandemia. Están debajo del índice de la pobreza porque es gente que toda su vida trabajó y sin trabajo la gente se enferma y se angustia”, apuntaron desde Nueva Esperanza.
Las dilatadas negociaciones hicieron que la medida de las organizaciones encabezadas por Nueva Esperanza se extendiera por casi dos semanas, con todo lo que implica para las familias estar habitando un espacio no preparado para tal fin y en medio de una pandemia.
A esas condiciones de permanencia se suma el malestar de las y los vecinos de la zona, quienes se acercaron al lugar para anunciar a los manifestantes que presentarán una nota para pedir que se llegue a una solución y se levante el acampe frente a los ruidos y las condiciones en las que las familias están viviendo sobre el asfalto de la zona de La Perla.
