Comercios: subieron los sueldos pero peligran puestos de trabajo
Se acordó un incremento semestral del 20% y el básico se elevó a $11.700. Por la inflación, la caída del consumo y los “exorbitantes” valores para renovar alquileres se perderían puestos. “De los contratos de temporada nadie quedó fijo”, advirtieron.
Son varios -pero claros- los factores que ponen hoy en una posición de riesgo tanto a propietarios de comercios como a los empleados de los mismos. El gremio cerró recientemente un incremento salarial semestral de poco más del 20%, pero la creciente inflación, la caída del consumo y los elevados valores para renovar el contrato de los locales podría derivar en el cierre de algunos negocios y por ende en la pérdida de puestos de trabajo.
El verano es para el Sindicato de Empleados de Comercio un período clave para analizar y proyectar cómo se presentará el invierno. Luego de una temporada “corta” por el anticipado inicio de clases y con mucho menos movimiento turístico que las anteriores (desde el sector la definieron como “de regular a mala”), los contratos laborales de verano este año no se extendieron.
“Después de cada temporada siempre hubo gente que quedaba en sus lugares de trabajo. Se iban incorporando por el movimiento que luego había en los fines de semana largo, pero eso no ha ocurrido esta temporada. Se han terminado los contratos de temporada. No ha quedado nadie fijo”, advirtió el secretario gremial del SEC, Guillermo Bianchi, en diálogo con QUÉ.
Sin embargo, la no extensión de los contratos no es el problema más grave que tienen hoy los trabajadores mercantiles. Si bien -por el momento- “no hay intensiones de las grandes empresas de despedir gente en forma masiva”, hay una situación que se viene generalizando: “Se están perdiendo puestos de trabajo porque cuando algunos trabajadores se jubilan o dejan el lugar, no se reemplaza”, es decir que “no hay nuevas fuentes de trabajo”.
En simultáneo, “la inflación crece y el consumo baja”. Un simple análisis del presente económico a partir de esas variables indica -por experiencia- que “esa situación trae a mediano o largo plazo la pérdida de puestos de trabajo”, por eso será clave analizar qué ocurrirá en el cierre del primer trimestre del 2016.
Días atrás el Sindicato de Empleados de Comercio cerró un acuerdo paritario semestral que consiste en un incremento salarial de poco más del 20% para los trabajadores mercantiles regirá a partir de abril y terminará en septiembre. El sueldo mínimo, sin contemplar la antigüedad, pasará a ser de $11.700.
Se abonará de la siguiente manera: “El 20% en abril y dos cuotas fijas, una a pagar entre el 1º y el 7 de abril, y la otra entre el 1º y el 7 de junio”. En el segundo semestre del año se buscará reabrir la negociación paritaria.
CUANDO EL NEGOCIO DEJA DE SER NEGOCIO
Más allá del aumento salarial próximo a pagar, el aumento aplicado en la tarifa de luz y los “exorbitantes” valores que se piden para renovar el contrato de los locales de Mar del Plata son los costos que más están impactando entre los comerciantes.
“Mar del Plata necesita recuperar empleo porque sigue la segunda ciudad argentina con más desempleo. No se están reponiendo los puestos de trabajo. Y creemos que estamos frente a un invierno complejo”, alertó el representante del Sindicato de Empleados de Comercio.
En este sentido, la renovación de los contratos de alquiler constituye “un viejo problema” que afecta fundamentalmente a los comercios medianos y chicos de la ciudad. Esos valores no se rigen por ninguna variable regulada, sino que son meramente especulativos: los impone la calle.
“Lo que se pide para renovar son cifras imposibles de pagar, porque encima el consumo está bajando. Si te aumenta la luz y el alquiler, estás en problemas. Además del costo laboral que depende de muchos factores, si no hay venta, si no hay consumo, no hay negocio que aguante”, remarcó Guillermo Bianchi.
En el comienzo del 2016, según informaron desde el Sindicato, la renovación de los contratos tiene un piso de recargo que ronda el 40%. Es decir que un pequeño comercio alejado de la zona céntrica que pagaba $11 mil de alquilar, pasará a abonar más de $14 mil.
En el centro, sobre calles como Rivadavia, Belgrano o San Martín, son varios los pequeños comercios que pagan más de $35 mil pesos mensuales. Para renovar, deberán acceder a pagar un alquiler de cerca de $50 mil.
Algunos de los locales ubicados en los alrededores el paseo comercial Güemes ya pagan alquileres cercanos a los $50 mil. Para renovar, con un piso de entre el 35 y el 40% de incremento, se ven obligados a pagar $20 mil pesos más solo de alquiler.
“Son cifras exorbitantes y el impacto es grande”, advirtió Bianchi y precisó en este sentido que “no hay regulación en el tema de los alquileres comerciales”, sino que se trata de “un sistema especulativo que juega en contra de la economía de la sociedad”
Por eso, el secretario gremial del Sindicato remarcó que “hay que rever esta situación y tener una actitud mucho más responsable porque por estos motivos muchos locales terminan cerrando sus puertas frente a la imposibilidad de poder pagar”. Naturalmente, el cierre de comercios ante la dificultad para cubrir ese alquiler genera pérdida de puestos de trabajo, más aún en un contexto económico inflacionario y con fuentes recargas en los impuestos.
