Domingo 12 de mayo | Mar del Plata
17/03/2016

Comprobó que fue apropiado y denuncia a quienes lo criaron

Gustavo Cerecedo tiene 47 y descubrió que a su madre biológica, una empleada doméstica que trabajaba para un militar, le robaron su bebé a los pocos meses de haber nacido y la amenazaron de muerte. Pide una medida cautelar.

Comprobó que fue apropiado y denuncia a quienes lo criaron
(Foto: ilustrativa / QUÉ Digital)

Gustavo Cerecedo tiene 47 años y un objetivo: que la Justicia actúe para que alguien le devuelva, de alguna manera, la posibilidad de compartir sus días con su familia biológica. Es que, gracias a una investigación, comprobó que fue apropiado por la pareja que lo crió y que, en realidad, su verdadera madre es una empleada doméstica que trabajaba para la familia y a quien le robaron su bebé a los pocos meses de haber nacido, tras amenazarla de muerte. Hizo una denuncia en la que solicita una medida cautelar de inhibición de bienes ante la Fiscalía Federal Nº 2.

Según consta en la presentación -patrocinada por el abogado Julio RazonaGustavo denuncia a Dora René Carceglia (su supuesta madre) y Leda Benigna Cerecedo (su supuesta hermana) por los delitos de supresión de identidad de un menor, falsificación de documento público y uso de instrumento público falso. En la presentación no se incluye a quien lo crió como padre –Luis Cerecedo- ya que falleció en 1993.

De acuerdo a lo denunciado por el hombre, en su partida de nacimiento consta que nació el 8 de diciembre de 1969, que es hijo de Luis Cerecedo –por entonces integrante de las Fuerzas Armadas- y de Dora Carceglia, y que nació el 8 de diciembre de 1969 a las 20,30 en la localidad de Ezeiza. Sin embargo, expone el denunciante, “he tomado conocimiento y certificado fehacientemente que no soy hijo del matrimonio Cerecedo-Carceglia, ya que fui sustraído de mi verdadera madre, Elda Orrego, quien reside en la localidad de Burzaco”. “Mi verdadera fecha de nacimiento es el 8 de noviembre de 1969, nací en el Hospital Zonal General de Agudos Lucio Menéndez de Almirante Brown”, suma.

En ese contexto –y con el respaldo de la documentación pertinente, como el libro de actas del hospital donde se certifica su nacimiento en esa fecha- el hombre de 47 años explica que Orrego trabajaba como empleada doméstica de una peluquería que era manejada por su supuesta madre y su supuesta hermana.

“Existía una relación de amistad y confianza con mi verdadera madre, tan es así que durante su embarazo y mi nacimiento le permitieron seguir trabajando y cuidarme en su lugar de trabajo”, relata el denunciante, quien repara en la imposibilidad de su madre biológica en cuanto a la instrucción, debido a sus condiciones de pobreza extrema.

En esa misma línea, Gustavo consigna que algunos meses después de su nacimiento, quien luego lo crió como su madre le pidió a su empleada el acta de nacimiento del bebé, con el supuesto objetivo de bautizarlo en Luján. Sin embargo, al regresar de ese viaje, el matrimonio no restituyó el menor con su madre. Muy por el contrario, se lo apropiaron –falsificaron la partida de nacimiento- y amenazaron de muerte a la mujer.

“Las denunciadas amenazaron de muerte a mi madre, junto a Luis Cerecedo, quien le aseguró que si reclamaba a su hijo la iba a buscar y la haría ‘desaparecer’”, se precisa en la denuncia, al tiempo que se repara en la “ferocidad” del hombre, que era miembro de las Fuerzas Armadas, numerario de Gendarmería Nacional y quien prestaba servicios en el Edificio Centinela de la Ciudad de Buenos Aires.

“No tengo precisada la fecha cierta en la que se produjo mi sustracción. Sé por lo que me ha narrado mi verdadera madre, a la que hallé luego de una larguísima y muy dificultosa búsqueda, que a los dos años de mi nacimiento la familia Cerecedo dejó de vivir en Burzaco, de un día para el otro, radicándose todos los integrantes en Misiones”, se sostiene.

LA BÚSQUEDA, LA PRUEBA Y LA EXPECTATIVA

En ese sentido, se aclara que la búsqueda llegó a Necochea, ya que en 1976 la familia se radicó en dicha localidad y pese a los intentos de la madre biológica del denunciante, nunca pudo recuperar a su hijo. “Con la documentación original en mi poder, más el testimonio de los vecinos de la zona de Burzaco y Ezeiza, pude reconstruir mi infancia, mis orígenes, mi verdadera identidad”, indica Gustavo.

A su vez, en la denuncia se agrega una prueba para nada menor: es que el hombre llevó adelante una pericia genética de histocompatibilidad con su madre Elda Orrego, examen que se realizó en Mar del Plata y cuyo resultado fue positivo en relación al vínculo de maternidad entre la mujer y el hombre.

Con todos estos elementos, Gustavo presentó una denuncia ante la Fiscalía Federal Nº2 en la cual solicita que la Justicia dicte una medida cautelar de inhibición de bienes respecto a las mujeres denunciadas, con el objetivo final de que se condene a ambas “al máximo de pena previsto en nuestro ordenamiento penal, atento el gravísimo e irreparable daño que me han ocasionado”, según se expone.

Ver más: , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

17/03/2016