Un pedido de ayuda para el hijo de una víctima del Repunte
En septiembre fue atropellado por un auto que se dio a la fuga y tiene que ser operado, pero la obra social del Simape no responde: “El sindicato y empresarios se lavan las manos”.
Un pedido de ayuda como muestra del desinterés empresarial y sindical portuario en una causa tan sensible como la de la lucha por las víctimas del Repunte, el buque hundido en junio del año pasado. El hijo de uno de los tripulantes en septiembre del año pasado fue atropellado por un auto que se dio a la fuga y ahora necesita una nueva operación a causa de las lesiones de aquel momento, pero los familiares denuncian que la obra social del Sindicato Marítimo Pesquero (Simape) dejó de atenderlo y no les dan ninguna respuesta.
“El sindicato y empresarios se lavan las manos“, apunta un breve comunicado de los familiares del Repunte en el que vuelven a hacer visible el desinterés del sector que maneja el Puerto y en el que piden ayuda, una vez más.
Según contaron, en las últimas horas, una de las esposas de las victimas del Repunte tuvo que llevar a su hijo a la guardia del Hospital Interzonal de urgencia. “Hace cuatro meses que estamos tratando de conseguir una placa para la clavícula que se le quebró el año pasado en un accidente”, explicaron y recordaron que el 4 de septiembre pasado Ignacio Homes “fue atropellado por una camioneta, que lo dejó tirado y nunca se hizo cargo”.
En este sentido, explicaron que tras ese siniestro Homes “perdió un riñón y le pusieron una placa en la clavícula, pero esa placa se salió y el hueso ahora se le salió y prácticamente lo tiene afuera”.
Y así denunciaron que la obra social del Simape no lo siguió atendiendo. “Le hemos pedido a todos ayuda, pero no conseguimos nada”, lamentaron.
“Esta es la vida de los hijos y las viudas de los que mueren en el mar. Sépanlo los que están trabajando que si a ustedes les pasa algo quedan totalmente abandonados. El sindicato y los empresarios se lavan las manos“, advirtieron los familiares y volvieron a pedir ayuda para poder operar al hijo de uno de los tripulantes. “No puede esperar más tiempo”, señalaron.
