Los suspendidos, a River
Pese a que resta la decisión final, este martes quedó establecido que los partidos del torneo de fútbol local entre Almagro Florida ante Círculo y Quilmes con Banfield se disputarán en el Juan José Carnevale el próximo 8 de abril.
Aún falta conocer la sanción. Pero, al menos, se sabe cuando habrá fútbol. En contrapartida con lo que se preveía, los encuentros suspendidos del pasado sábado en la cancha de Quilmes por el desastroso estado del campo de juego no se jugarán este miércoles sino que se llevarán a cabo la otra semana y en cancha de River.
La decisión, en principio, es sorpresiva ya que antes de comenzar la temporada había quedado estipulado que no se iban a jugar partidos atrasados luego de disputarse una nueva jornada. Sin embargo, el mal comienzo en el José Piantoni obligó a que esta medida quede en el olvido.
Por eso, estos dos partidos que deberán llevar a cabo Almagro Florida y Círculo Deportivo de Otamendi por un lado, y Quilmes con Banfield por el otro, además deberán mudar la localía, algo que no cayó para nada bien en la gente del “Canario” y que tendrá una tarea extra: encontrar una cancha donde hacer de local para lo que resta del certamen.
Las opciones no son muchas ya que los escenarios principales ya tienen a cuatro clubes cumpliendo esa función. La excepción es el José Alberto Valle de Kimberley que, además de albergar al “Dragón”, tiene a Peñarol alquilando.
Volviendo al tema disciplinario, este miércoles quedará establecida la sanción que recibirá el “Cervecero” por haber presentado la cancha en esas condiciones y no haber avisado. A su vez, se especula con una queja del conjunto otamendino, ya que realizó el viaje hasta la ciudad para jugar su partido y este, finalmente, no se llevó a cabo.
Un mal comienzo para Quilmes que influyó, lamentablemente, en otros tres equipos que nada tenían que ver. Ahora, habrá que ver que es lo qué sucede con El Cañón y Unión, dos conjuntos que, en teoría, tendrían que disputar sus partidos en Colón y 196 pero, probablemente, deban “levantar el campamento” y conseguir otro césped que los deje jugar.
