México le secó El Alma
Luego de un pobre segundo cuarto, el seleccionado argentino tuvo un tercer segmento brillante, pero en el último apenas convirtió 11 puntos y México lo aprovechó para pasar al frente y romper el invicto albiceleste. Con esta caída por 95 a 83, el elenco de Sergio Hernández enfrentará nuevamente al local el viernes.
“Me voy con una sensación fea porque no me gusta perder. Estoy caliente porque jugamos un último cuarto muy malo, pero Canadá era el rival a evitar y lo logramos”, fue el balance del entrenador Sergio Hernández tras la derrota ante México por 95 a 83. Mal pensado o no, cada uno sacará sus conclusiones. Pero en definitiva, el seleccionado argentino de básquet no pudo prolongar su invicto de 7 triunfos consecutivos en el Preolímpico de México que otorga dos plazas para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Y este viernes volverá a medirse con el local en las semifinales. Es que con este resultado, el conjunto albiceleste finalizó con un registro 6-1, en la segunda posición, por diferencia de tantos (-5) entre los mismos equipos involucrados en el empate.
Canadá, que hilvanó siete triunfos consecutivos, quedó primero con un hándicap favorable (+ 14), mientras que México terminó tercero con (-9). La segunda semifinal del torneo se animará mañana también y enfrentará a Canadá ante el cuarto, Venezuela (3-4).
En el equipo dirigido por Sergio Hernández, las principales vías de ataque fueron Luis Scola (26 puntos) y Andrés Nocioni (19). Dos movimientos mágicos de Scola en la pintura preanunciaron el muy buen partido del capitán: 4-0, en apenas un minuto y medio. Los dos equipos intercambiaron ataque por ataque y, en ese contexto, el local se sintió más cómodo con Ayón lastimando en la pintura (8 puntos), una marca que Marcos Delía no pudo contrarrestar.
Argentina continuaba vivo porque el flamante refuerzo de los Toronto Raptors estaba verdaderamente “en llamas” y al cabo de los primeros cinco minutos gozaba de una pequeña diferencia a favor: 13-11. El técnico Hernández cambió enseguida y mandó defensa zonal, pero México apostó a la liberación del tiro de Francisco Cruz (7). El partido siguió parejo y sobre el mismo cierre, Selem Safar metió un triple bárbaro para estampar la máxima: 26-20.
Un parcial 8-2 le permitió a México igualar 28-28 (a 7m. 22s. para el final del segmento), aprovechando sendos errores de Laprovíttola y Safar. El equipo de Valdeolmillos empezó a sobrecargar el rebote ofensivo y causó mucho daño en la retaguardia argentina con un Gutiérrez (6) activo.
El árbitro estadounidense Anthony Jordan, muy poco imparcial, empezó a jugar su partido en favor del local y le cobró una técnica a Nocioni (tercera), tras una aparente lícita tapa del santafesino sobre el apuntado base mexicano. El local se disparó a 36-30, a falta de 4m. 21s.
Hernández movió el banco: a la cancha con doble base (Laprovíttola-Campazzo) más un perimetral de buen tiro (Garino) para aportar en ofensiva. Dos triples seguidos de Laprovíttola decoraron la igualdad en 38, cuando quedaban 2m. 08s. Un mejor pasaje de México en el tramo final del cuarto lo dejó en ventaja por 45-42, al cabo de los 20m. iniciales.
En el inicio del tercer capítulo, Laprovíttola asumió las riendas, habilitó bien a Scola (4) por duplicado y Argentina retomó la delantera (48-47). El reingreso del ‘Chapu’ Nocioni, a puro coraje, más sendas conversiones oportunas de los bases (sobre todo Campazzo con 9 puntos), le permitieron al equipo de Hernández tomar una buena ventaja: 53-62, cuando quedaban casi 4 minutos.
Un robo de Garino y una corrida de Nocioni (36 años), casi de costa a costa, ratificaron el mejor pasaje de la escuadra albiceleste: 57-69, cuando se ingresaba al minuto final. Y a todo esto, el capitán Scola, sentado en el banco, descansando.
En los últimos 10m., el equipo local jugó sus cartas, con cargas más profundas al canasto. Metió un parcial 8-0, en menos de 120 segundos, y encendió alarmas (67-72). El escolta Cruz ensayó la reacción del local que se puso a tres (74-77), con un elenco que estaba al límite en lo físico. El partido cobró una vibración increíble, con una multitud que se transformó en sexto jugador.
El titán Ayón siguió lastimando en la pintura y estableció el empate 83-83, cuando quedaban 2m. 47s. En el tramo de cierre, el equipo mexicano fue una tromba (metió un ráfaga 17-0) y se benefició de algunos pitazos dudosos para asegurarse la victoria, que lo dejó tercero en la clasificación, pero que le permitirá evitar al “cuco” Canadá y enfrentar nuevamente a la Argentina.
