Elegir de alguna manera
Editorial QUÉ, en la Radio
Hay que elegir. Todo el tiempo hay que elegir. Una puerta abre infinitas puertas que a su vez cierran infinitas puertas. Y se crean infinitas posibilidades, infinitas realidades sucediendo a la vez todo el tiempo. Cada segundo estamos construyendo una realidad y destruyendo millones más que nunca llegaron a existir.
La vida es ciencia ficción apocalíptica, pero con menos zombies y más cuentas vencidas que pagar. El día empieza con decisiones que tomamos sin pensar: café o mate, abrir primero Facebook o el mail, caminar por la vereda del sol o la sombra.
Elegir, una pistola imaginaria apunta a la cabeza. Hay que elegir, sino alguien más elegirá por nosotros. Pero cómo, cómo se elige. Basado en qué. Es imposible tener todas las alternativas, todas las variables, saber todas las consecuencias. Pero hay que elegir.
A veces la mejor elección es solo la que a uno lo hace feliz y nada más importante. Tal vez es ser egoísta, tal vez la religión del “Sálvese quien pueda” sea la mejor hasta que nadie se pueda salvar.
Otras veces hay que elegir pensando en los demás, en demases que incluso no conocemos. Y vamos a construir una realidad entre todos con una elección y vamos a destruir tantas realidades más. Que alguien se apiade de todos nosotros el 22 de noviembre cuando tomemos la decisión, sea cual sea.
