Pilotti, entre tentativa de femicidio, lesiones graves y leves
Esos fueron los pedidos realizados por la fiscalía, el particular damnificado y la defensa en los alegatos. Ahora los jurados deberán resolver si Pilotti es culpable o no de esos delitos. La abogada defensora lanzó fuertes y polémicas acusaciones contra Victoria.
Tentativa de femicidio, lesiones graves doblemente agravadas por violencia de género y por el vínculo preexistente y lesiones leves son las tres calificaciones que plantearon este jueves las partes en el marco de los alegatos del juicio por jurados que se lleva a cabo contra Cristian Pilotti, el joven que está acusado de haber golpeado salvajemente a su expareja, Victoria Montenegro, en enero de 2015. A partir de esta situación el juez que coordina el debate junto a las partes decidió que el veredicto tenga varios tipos penales, algo que ya que les fue comunicado a los jurados para que pasen a deliberar sobre la culpabilidad o inocencia del acusado.
El fiscal del juicio, Leandro Favaro, mantuvo en su alegato la calificación con la que Pilotti llegó al juicio –femicidio en grado de tentativa, -que supone una pena de prisión entre 10 y 15 años- y de manera subsidiaria -tal como lo había adelantado durante la primera jornada- pidió que el jurado lo encuentre culpable por el delito de lesiones graves doblemente agravadas.
A lo largo de su alegato, el fiscal hizo alusión una y otra vez a la violencia de género, psicológica y física a la que fue expuesta Victoria por Pilotti durante años y sobre el hecho en sí entendió que de acuerdo a los testimonios escuchados en el juicio se acreditó que la violencia con la que Pilotti golpeó a Victoria podría haberle provocado la muerte. “Debió conocer esa posibilidad de muerte y no le importó en absoluto”, sostuvo y destacó que las fracturas provocadas por los golpes en la cara “pusieron en riesgo la vida de Victoria”.
En este sentido, Favaro consideró que se trató de un caso de violencia de género “de manual”. Asimismo, remarcó el testimonio de peritos psicológicos que lo tildaron, según sostuvo, de “egocéntrico, narcisista, que se creía superior a los demás, impulsivo y violento”.
A su turno, la abogada de Victoria, Patricia Perelló, remarcó que “pocas veces la víctima es escuchada en cuanto a lo que quiere”, y así anunció no compartir la calificación de tentativa de femicidio por los propios dichos de Victoria, quien durante su declaración en el juicio aseguró: “No creo que haya querido matarme, pero se le fue la mano, me siguió pegando”.
De esta manera, la abogada le dijo a los jurados que “es muy difícil juzgar las intenciones porque es algo del fuero íntimo”. Y entonces sostuvo que en el hecho juzgado “se produjeron lesiones graves agravadas doblemente porque existía una relación de pareja de largos años y por violencia de género”. Asimismo, pidió, a partir de lo hablado con Victoria en la previa, una “prohibición de acercamiento absoluta” y que sea obligado a realizar un tratamiento psicológico y psiquiátrico.
LA DEFENSA CONTRA LA VÍCTIMA
Los abogados de Pilotti intentaron cuestionar cada uno de los puntos de la acusación a excepción de los golpes reconocidos por el propio acusado, pero consideraron que los mismos solo le provocaron a la joven “lesiones leves”, por lo que solicitaron esa calificación. E ese marco, cuestionaron fuertemente a la víctima con llamativas acusaciones del tipo de “haber armado” la causa contra Pilotti para lo cual hasta pusieron como ejemplo “el caso de Fede Bal”.
En primera instancia, el abogado Iván Gonzalo cargó contra la “falta de acreditación” por parte de la fiscalía de la calificación de tentativa de femicidio y buscó explicar la agresión de Pilotti a Victoria a partir del consumo de éxtasis y alcohol por lo cual habló de efectos como “impulsividad e irritabilidad”. “Estaba drogado, estaba alcoholizado, la vio a Victoria con una mujer que le dio un beso y reaccionó como la droga lo llevó”, sostuvo.
Por otro lado, remarcó un testimonio que habló de un fuerte golpe que se dio la víctima “contra una barra o valla” para intentar desacreditar la acusación de lesiones graves. “Todo lo visible se trata de lesiones leves”, aseveró. Por su parte, la abogada Marina Flores no dudó en lanzar fuertes cuestionamientos y acusaciones contra la víctima y llegó a comparar la causa con “el caso de Fede Bal” al considerar que se trata de “una causa armada”.
“No la veo sumisa”, “hizo una recorrida en todos los medios de prensa”, “hoy gracias a Dios está íntegra y va a ser mamá, se recuperó rapidísimo”, “compartían buen sexo, las drogas y el alcohol”, “las víctimas de violencia de género se sienten ofendidas con este caso” y “no me cierra”, fueron algunas de las frases que la letrada pronunció ante la mirada de Victoria y su familia, visiblemente conmocionados por las palabras de la mujer que dijo “conocer muy bien a Cristian y a su familia”.
