“El lavado de dinero está muy vinculado al delito de trata”
Así lo expresó Alejandra Mángano, coordinadora del Área de Investigaciones de la Protex del Ministerio Público Fiscal de la Nación, en el marco de las II Jornadas “Mar del Plata le dice NO a la trata”
Alejandra Mángano, coordinadora del Área de Investigaciones de la Protex del Ministerio Público Fiscal de la Nación, expuso sobre el ataque sobre el núcleo patrimonial de las redes de trata, en el marco de las II Jornadas “Mar del Plata le dice NO a la trata”, organizadas por la Mesa Interinstitucional contra la Trata de Mar del Plata.
En este sentido, la funcionaria de la Protex se refirió a las dificultades que surgen en la investigación, y diferenció la trata con fines de explotación sexual de la trata laboral. En relación a la primera, mencionó la necesidad de determinar cuál es la ganancia de la organización. Para ello, explicó, a través de la obtención de registros o comunicaciones telefónicas, se puede estimar la cantidad de clientes diarios que acuden a determinado prostíbulo. Luego, el testimonio de las víctimas, sumado a planillas o cuadernos que pueden secuestrarse en el lugar, se conoce el valor del “pase”, es decir, el dinero que el hombre prostituyente paga por una mujer, como si se tratara de una mercancía.
De acuerdo a las investigaciones realizadas, indicó que se estima que un prostíbulo pequeño o mediano, recauda 400 mil pesos por mes.
El segundo escollo que es necesario sortear es conocer dónde está ese dinero que la organización obtuvo. “Ese dinero no declarado, obtenido de manera ilegal, ingresa al circuito nuevamente a través de inmuebles y autos, lo cual puede ser fácilmente comprobado, pero también suelen hacer hasta 15 fideicomisos por dos prostíbulos”, sostuvo Mángano. “El lavado de dinero está muy vinculado al delito de trata con fines de explotación sexual”, aseveró.
En relación a la trata laboral, que se da en el sector rural, la industria textil, y diversas empresas que producen bienes y servicios, una vez que se determina la explotación –explicó Mángano- es necesario ver cómo repercutió en la economía del imputado. “Hay que analizar la responsabilidad de todos los actores en la cadena de producción. Por lo general, el que más gana es quien más alejado está de la explotación”, indicó la funcionaria de la Protex, quien señaló que enseguida se escuchan excusas como “yo no sabía” o “yo al campo no iba”, pero son quienes brindan los materiales e insumos y saben cuánto pagan por hora a un trabajador.
El juez Santiago Inchausti, a su turno, hizo eje en la necesidad de reparar “integralmente a la víctima”, y en este sentido planteó en la posibilidad de una indemnización. “Actualmente no hay indemnizaciones por varios factores. Por un lado, muchas veces las víctimas no se sienten víctimas, y por otro lado, pueden tener una relación con el tratante o explotador que mejore de algún modo el trato que tenían en su país de origen, o saben que no tienen una situación migratoria regular”, explicó.
Enseguida, sostuvo que se torna fundamental el asesoramiento jurídico de las víctimas. Pero también reparó en que la indemnización debería ser automática, independientemente si la víctima se presenta o no al momento del juicio.
A su vez, contempló que muchas veces la situación de pobreza y vulnerabilidad de las víctimas no pueden aguardar los tiempos del proceso penal, por lo que instó a que puedan ser inmediatas y luego se reintegre el dinero a partir del decomiso.
