Festival de Poesía, de Acá: donde los textos dialogan entre sí
“La dinámica de los festivales es que funciona un poco como espacios de aprendizaje”, explica Matías Moscardi, uno de los organizadores del evento. Se realizará el sábado y domingo con unos 30 poetas de diferentes ciudades.
“En Mar del Plata se está escribiendo más poesía que antes”, explica Matías Moscardi, uno de los organizadores del Festival de Poesía Independiente, de Acá que se realizará el sábado 11 en Plataforma 12 –piso 12 del Banco Provincia de San Martín 2583- y el domingo 12 en el café Bon Vivant –Independencia 1003 –, con entrada libre y gratuita y contará con la presencia de unos 30 poetas de distintos lugares del país.
Matías Moscardi es docente en la universidad de letras, escritor e investigador de la poesía contemporánea en Argentina. Por estos motivos es que, cuando dividieron los roles para la gestión del festival, él se encargó de la selección de poetas que participarán de las lecturas.
“Los poetas de afuera se re copan en venir de onda. Este año tendré como a trece metidos en mi casa”, cuenta Matías y añade que este año vendrán a participar de las lecturas poetas de Bahía Blanca, Buenos Aires, La Plata, Rosario, Neuquén y Entre Ríos.
“No recibimos ningún tipo de fondo de la Municipalidad ni apoyo. Yo tengo cero burocracia, un desconocimiento gigante y las pocas experiencias que tuve fueron muy dilatorios. Muy complicado para conseguir poca plata que no alcanza para traer a todos los poetas”, aclara Matías.
Este es el octavo año consecutivo en el que se realiza el festival, su organizador recuerda que “el primero, de 2007, fue algo muy chico, pero al que fue mucha gente. No era tan frecuente encontrarse con poetas como es ahora. En ese entonces fue muy íntimo”.
“Ahora –dice Matías- creció mucho. Se instaló en las redes y tiene repercusión nacional, aunque la poesía siempre es minoritaria. Pero los poetas lo conocen y vienen de onda a participar” y añade que este año será el que mayor cantidad de poetas participen: 18 de afuera y 10 de la ciudad.
-¿Cómo será el festival este año?
–Este año serán mesas de tres lectores que leerán sus poemas. El sábado además tocara la banda Alfonsina y en la fiesta la música estará a cargo de dos Djs. Y el domingo, además de las lecturas, vamos a presentar el libro El hielo cubrirá Nineveh, de Keneth Rexroth, que lo sacamos desde nuestra editorial Luz mala. No habrá ninguna actividad más porque este año es en el que más poetas convocamos.
-¿Esto se debe a que creció el número de personas que escriben poesía?
–Acá en Mar del Plata se está escribiendo más poesía. Hay más visibilidad por el Facebook, la gente postea sus propias cosas y uno se entera quién escribe. Los vínculos están más aceitados. Además se agilizó mucho el tema de la edición. Cualquiera puede editar su fanzine, su libro de poesía y repartirlo. Eso promueve mucho la escritura. Cada año aparece gente nueva en la poesía.
-¿Cómo funciona una lectura de poesía dentro del festival?
-Es todo un tema, escribir implica cierto grado de exposición y de dialogo. Escribir es una forma de dialogar. En el momento de leer la poesía el poeta se juega gran parte de sí mismo. La dinámica de los festivales es que funciona un poco como espacios de aprendizaje y puesta a prueba del texto. Vos lees y entras en dialogo con otros poetas y vos ahí podés reacomodar las coordinadas de tu propia escritura.
-¿Cuál es ese aprendizaje que se genera?
-El texto entra en cotejo con otros textos poéticos y es una instancia de aprendizaje, no porque alguien enseñe, sino por el tipo de contexto. Hay veces que aprendes más de literatura en un festival de poesía de cualquier lugar del país que en una clase concreta de la facultad. No digo que en la clase no se aprende, pero se aprende de otra manera.
-¿Habrá feria de venta de libros de poesía?
-Sí, los poetas que vienen están en relación con alguna editorial o son editores ellos mismos y el que viene trae libros. Los stands los vamos armando con todo lo que traen. Se reúnen títulos y proyectos que de otra forma son inconseguibles. De la ciudad estáran las editoriales La bola, Puente Aéreo, Letra Sudeca y Luz mala.
-Vos dijiste antes que la poesía es minoritaria. ¿La sociedad necesita celebrar la poesía? ¿mantenerla?¿promoverla?
-Es una pregunta difícil de responder que implica un análisis profundo de la literatura. La literatura es un lugar donde se ponen en palabras cosas que en otros lugares no se ponen en palabras, como que la literatura es una zona en donde se dicen cosas que en otros lados no se dicen o no se dicen de esa manera. De alguna manera la literatura es anticipatoria, traduce cosas que solo la literatura puede traducir. Por eso para mí la poesía y la literatura son importante.
-¿Anticipatoria en qué sentido?
-Ese poner en palabras de la literatura funciona como una especie de proceso analítico de la cultura. Entonces la poesía y la literatura son zonas de la cultura donde se ponen en palabras lo que pasa de una u otra manera y con la insistencia, que siempre es colectiva nunca individual, se va sintomatizando algo y al mismo tiempo se esboza la posibilidad de metabolizar ese síntoma. La literatura no funciona como cura de ese síntoma, pero sí como escenario donde se dan y se visibilizan ciertos síntomas culturales. En tanto que puede hablar de esos problemas es significativa.
Igualmente esta es una respuesta improvisada, hay que pensarlo más. La utilidad de la literatura y su función en la sociedad se viene problematizando desde Sartre.
-Improvisada o no fue toda una respuesta.
-Es que uno se lo pregunta todo el tiempo como escritor y docente, se pregunta si tiene sentido lo que uno hace, si es significativo, si modificada en algo las cosas. Y uno prefiere pensar que sí y eso no significa que tenga las razones concretas para pensar así.
