Procesión, homenaje y celebración: llega una nueva ceremonia en honor a Iemanjá
El tradicional evento, parte de la religión africanista, se realizará el primer domingo de febrero en las playas céntricas de la ciudad. ¿De qué se trata?
Como sucede desde hace décadas cada primer domingo del segundo mes del año, el próximo 4 de febrero en Mar del Plata se realizará la tradicional ceremonia en honor a la orixá africana Iemanjá, regente del agua de mar, patrona de pescadores y protectora de la vida.
Se trata de un evento que congrega a miles de fieles que llegan de toda Argentina y de países limítrofes, además de marplatenses y turistas que se acercan a la costa, lo que la convierte en la segunda más importante del mundo, después de Salvador de Bahía, Brasil.
En este 2024, la procesión que encabezará la imagen partirá el domingo 4 de febrero a las 19.30 desde el playón provincial, a la altura de Las Heras y el boulevard marítimo, para llegar a las 20 a la Playa Popular II, y dar paso a la festividad que incluye una serie de atractivos vinculados con la cultura africana y con la diversidad, y que suma todos los años su capital simbólico al sentido de integración en Mar del Plata.
Bajo la organización del babaloríxá Hugo Watenberg, presidente del Centro de Estudios Africanistas e Ilé Reino de Iemanjá Bomí, la ceremonia busca rendirle tributo a Iemanjá, que es “la orixá femenina más importante, considerada la virgen de los navegantes, la protectora del hogar, la diosa de la fertilidad o la madre de los peces”.
“Cada culto a los orixás tiene su particularidad. A Iemanjá se le rinde tributo universalmente el 2 de febrero, aunque en Mar del Plata, por un tema de agenda turística, la celebración se hace el primer domingo de febrero”, explica Watenberg, quien además destaca la importancia de mantener esta tradición de adoración como forma de resistencia.
Es que, según cuenta la historia, en Latinoamérica, el culto a esta orixá se remonta a finales del siglo XVI, cuando comenzó a llegar la población africana que era esclavizada. Cuando arribaron a América, a los esclavos se les impidió adorar a sus dioses y se los obligó a venerar a los de la religión católica.
En ese entonces, para no abandonar sus creencias, los esclavos pretendieron brindar rito a las imágenes católicas, aunque, en la más intimidad, continuaron adorando a sus propios dioses. De esta forma, producto del tráfico de esclavos, la cultura y religión yoruba se expandió y adoptó diferentes formas sincréticas.
En Argentina, las primeras manifestaciones africanistas datan de fines de los años sesenta, provenientes de Brasil y Uruguay. Y en esta edición, la número 40, quienes llevan adelante esta celebración esperan que fieles, simpatizantes e interesados en la diversidad e integración, se den nuevamente cita a orillas del mar para participar de una verdadera fiesta turística y cultural.
