Seraquedá: reggae de Capital para bailar en la playa
La banda porteña se encuentra girando en la Costa Atlántica con base en Mar del Plata. Esta tarde se presentan en la Base Naval. “Mi orgullo pasa no pagarle a un bolichero para tocar”, dice la cantante del grupo, Kamila Bouquillard.
La banda porteña de reggae Seraquedá está girando por la Costa y este viernes a la tarde se presentarán en la Base Naval. “Si yo disfruto sobre el escenario y bailo y me conecto, yo sé que todos lo van a disfrutar”, cuenta Kamila Bouquillard, la rasta cantante del grupo.
Seraquedá tiene unos 10 años como banda. Una década de autogestión, de reggae, de hacer bailar a la gente, de canciones y música. Distinto (2013) es el último disco de la banda. “Tenemos el disco que queríamos hacer y un poco más también, superó las expectativas”, dice orgullosa Kamila.
Kamila considera que el “reggae es eso que cuando lo pones cerrás los ojos y ves verde. El reggae te pide esa necesidad de aire y de playa”.
-¿Cómo fue el proceso de grabación de Distinto?
-Se hizo largo. Nuestro primer disco fue en 2006, después hubo movimiento en la banda que nos retuvo. Este disco, lo que tiene es que nos tomamos mucho tiempo para producirlo y hacer cada canción. Al momento de grabarlo fue muy lindo, me pude desarrollar como quería. En Distinto me sentí como pez en el agua grabando.
-¿Y cómo sentís este nuevo material cuando lo escuchás?
-Tenemos el disco que queríamos hacer y un poco más también, superó las expectativas. Un poco se dilato porque uno es autogestor. Lo escucho y me encanta, cuando lo escuché la primera vez hasta se me cayó una lágrima. Para mí es un discazo.
-¿Dónde preferís estar en la sala de ensayo o en el escenario?
-A mí el ensayo me encanta. Pero es en el escenario con gente, no pasa tanto por la gente en sí, sino lo que uno quiere sentir, lo disfruto un montón. Estos días frente al mar fue decir “Wow”. Si yo lo disfruto y lo bailo y me conecto, yo sé que todos lo van a disfrutar. Para mí esa es la esencia de querer salir a tocar, es esa sensación de lo que va vuelve y ahí el reggae es lo mejor.
-¿Qué lugar ocupa la banda en tu vida?
-En mi vida ocupa un montón de lugar. Estoy en pareja con el bajista y tenemos una hija. Este es el momento de sembrar y sembrar, buscando pasarla bien y la música tiene esto, tampoco hay que pedirle demasiado, es una bendición hacer música.
-¿Qué encontraste en la música?
-En la música encontré todo. Cambiar la vibra es alucinante. Me encantaría vivir de la música, peor no le cargo a la música toda esa responsabilidad. Si yo pusiera sobre la música toda esa responsabilidad la vería como un trabajo. Yo trabajo determinada horas por día para poder hacer música e ir y hacerla con libertad. Disiento del concepto de éxito que tienen otros.
-¿En qué sentido?
-El éxito puede ser no tener dinero o estar en un momento de la vida que te dejás llevar y estás tambaleando. Entregarse y disfrutar en cada situación. Para la sociedad el éxito es que te vaya bien, que te contraten y que te paguen.
-¿Y cuál es tu éxito?
-La banda es mi mayor éxito en este momento.
La cantante, además, dice que en Mar del Plata pasan cosas parecidas a Capital Federal con respecto al circuito de lugares y bandas. “Si el lugar está habilitado le cobra a las bandas para tocar y eso no rinde. Está poco valorado el trabajo del músico”.
-¿Ustedes no pagan para tocar?
-Siempre dijimos que no a pagar por tocar. Mi orgullo pasa por ahí: no le voy a pagar a un bolichero para tocar de soporte de una banda. Es como que una mafia la que se arma y las bandas hacen la vista gorda. El músico tiene que cerrar ese círculo y no pagar para tocar.
