Casita Azul: usurparon el centro contra la trata que todavía no es
A un año y medio de la expropiación del prostíbulo, la Provincia no terminó los pasos legales para que el Municipio cree el “Centro Marplatense de la Memoria”. Mientras tanto, una pareja con cinco hijas tomó posesión del inmueble.
Un año y seis meses ya pasaron desde que promulgó ley la expropiación de la denominada “Casita Azul”, el chalet de La Perla en el que durante 20 años funcionó uno de los prostíbulos más conocidos de Mar del Plata. El proyecto establecía que el bien, junto a sus instalaciones, serían transferidos al dominio de la Municipalidad de General Pueyrredon para crear el Centro Marplatense de la Memoria y la lucha contra el delito de trata de personas. Sin embargo ese punto del proyecto no avanzó, el inmueble permanece cerrado y desde hace una semana fue usurpado por una pareja y sus cinco hijas menores de edad.
Entre el martes y el miércoles de la semana pasada los vecinos de la zona dieron cuenta de que una familia se había instalado en la propiedad expropiada, ubicada en 20 de Septiembre 57. El miércoles, personal de la comisaría primera, Inspección General, la Dirección de Niñez y Adolescencia, y la Secretaria de Seguridad municipal, se acercó a la ex “Casita Azul” y encontró que un hombre de unos 32 años y su pareja de 26 habían usurpado el chalet junto a sus cinco hijas mujeres, de entre uno y nueve años.
Debido a que sobre el hombre -quien presentaría un delicado problema de adicciones- pesaban dos pedidos de capturas activos, se resolvió su aprehensión y posterior traslado a la Unidad Penal Nº 44 de Batán, donde permaneció alojado unas 48 horas y luego fue liberado. Inmediatamente regresó al chalet usurpado.
Desde la Dirección de Inspección General del Municipio, a cargo de Eduardo Bruzetta, se radicó una denuncia en la comisaría primera por el delito de usurpación. Ante la eventualidad del fin de semana largo, se resolvió que el procedimiento para desalojar la propiedad y brindarle asistencia a la familia se lleve a cabo recién a partir de este martes 13 de octubre.
EXPROPIACIÓN A MEDIAS
El proyecto para expropiar la ex “Casita Azul” fue presentado por los diputados marplatenses Pablo Farías (GEN) y Fernanda Raverta (Frente para la Victoria) con el impulso de la Mesa Interinstitucional contra la Trata de Personas.
Fue elevado tras distintos debates promovidos desde el 2009 por una serie de denuncias presentadas por distintas organizaciones sociales que motivaron allanamientos en el lugar, en los que se encontró a una veintena de mujeres dominicanas y paraguayas que eran traídas a Mar del Plata a través de engaños para ser prostituidas. En el 2010, el lugar quedó clausurado definitivamente.
La causa llegó a un juicio abreviado en el 2012. El Tribunal Oral Federal Nº1 decidió condenar a cuatro años de prisión a Graciela del Valle Carabajal, Eduardo Adolfo Muelas y Marcelo Luciano Muelas, por “trata de personas agravada, explotación económica de la prostitución y administración de casa de prostitución”.
Con el tiempo, la ley de expropiación avanzó en la Legislatura bonaerense, en abril del 2014 se convirtió en ley y luego fue promulgada por el gobierno de la Provincia de Buenos Aires, a cargo de Daniel Scioli.
Sin embargo, uno de los puntos más sobresalientes del proyecto implicaba que “el bien junto a sus instalaciones serán transferidos al dominio de la Municipalidad de General Pueyrredón, para ser afectados al funcionamiento del Centro Marplatense de la Memoria y lucha contra el delito de trata de personas”.
Ese punto no avanzó o al menos continúa trabado. Para que el Municipio tome posesión del inmueble, primero la Provincia debe hacerse cargo del pago de un dinero a los antiguos dueños, el cual estaría afectado por las deudas que presentaba la propiedad.
Según pudo constatar QUÉ, a un año y seis meses de la aprobación de la ley de expropiación en la legislatura bonaerense, el pago sigue pendiente y la Justicia deberá encontrar la manera de que la Provincia pueda concretarlo para así avanzar sobre la creación de un centro contra la trata en el lugar que durante unos 20 años se facilitó la prostitución.
El inmueble hoy está usurpado y deteriorado. Si bien este martes se haría efectivo el desalojo, todo indica que una vez completado el procedimiento la ex “Casita Azul” seguirá como hasta entonces: cerrada y con obstáculos legales para refuncionarlizarse.
