Costa Azul aplicó el segundo aumento en 15 días: el viaje a Miramar cuesta $2.500
La empresa de colectivos volvió a subir las tarifas de sus líneas a Miramar, Otamendi y Santa Clara del Mar. Cuánto sale cada viaje.
A dos semanas de haber subido sus tarifas, la empresa de colectivos Costa Azul que utilizan miles de trabajadores y estudiantes que se desplazan a diario entre Mar del Plata y localidades vecinas aplicó un nuevo aumento: a partir de este sábado viajar a Miramar pasó de costar de $1.500 a $2.500. En lo que va del año, acumula aumentos que llegan al 400% en algunos recorridos. Los tarifarios vigentes de los distintos recorridos.
El 8 de diciembre, mismo día en el que entró en vigencia el aumento de las líneas locales, la empresa Costa Azul que también pertenece al polémico empresario Juan Inza había decidido aplicar un incremento de hasta un 87% en sus tarifas.
Sin embargo, este sábado la empresa aplicó nuevos aumentos que van del 40% al 66,6%: en la línea que une Mar del Plata con Miramar el viaje más largo pasó de $1.500 a $2.500, en tanto que hasta Acantilados vale $1.100, a Playa Chapadmalal/Estafeta $1.300, a la Unidad Turística Chapadmalal, $1.500 y a Las Brusquitas, $2.000.
En lo que respecta a los servicios que unen Mar del Plata con otras localidades, a Batán/El Boquerón pasó a costar $1.100, a Otamendi $2.200, a La Polola, $1.500 y a La Ballenera, $2.400.
Por su parte, fuentes extraoficiales también confirmaron un incremento en los boletos de la línea 221 que también ostenta Inza y que une Playa Serena con Santa Clara del Mar, que pasó a costar $1.700 por esos 38 kilómetros de recorrido. Por otro lado, como parte del tarifario, entre el centro y Santa Clara el boleto pasó a costar $900 y de Serena a Mar Chiquita (53 kilómetros), pasó a tener un precio de $3.000.
Así, en relación a los precios que tenía en enero cuando viajar a Miramar costaba $580 y a Chapadmalal, $300, la empresa cerrará el año con una variación de sus tarifas que va del 331% al 400%.
La empresa Costa Azul que encabeza el polémico empresario Inza, el mismo que controla gran parte del servicio urbano y suburbano de General Pueyrredon, desde 2019 -además de tener la 221 que une Mar del Plata con Mar Chiquita- se quedó con los recorridos de El Rápido del Sud y opera las líneas 259 (Mar del Plata, Batán, Otamendi y Mechongué); 212 (Mar del Plata-Miramar); 216 (Villa Gesell, Cariló, Pinamar y Madariaga); 233 sobre Ruta 2 (Mar del Plata, Vivoratá, Coronel Vidal, General Pirán, Las Armas y Maipú) y 233 sobre Ruta 11 (Mar del Plata, Santa Clara del Mar, Mar Chiquita, Villa Gesell, Pinamar, Mar de Ajó, Santa Teresita y San Clemente del Tuyú).
Frente al tipo de recorridos que realiza se trata de un servicio regulado por el gobierno provincial que, sin embargo, más allá de que sea la Provincia la que debe autorizar las subas, tiene antecedentes de aplicar aumentos sin autorización alguna.
Además, más allá de que se trata de servicios que son utilizados diariamente por miles de personas y con frecuencias en algunos casos similares a las de las líneas suburbanas, no cuenta con el sistema SUBE instalado, lo que implica que personas que cuentan con tarifa social están desprotegidos al utilizar esos servicios y deben abonarlo únicamente en efectivo.
