Registran dos elefantes marinos en etapa de “muda” de pelaje en Mar del Plata
Se trata de una hembra y otro ejemplar adulto, ambos en “buena condición corporal” y atravesando el proceso natural de cambio de piel y ayuno.
Dos elefantes marinos fueron registrados en las zonas del Torreón del Monje y la Escollera Sur de Mar del Plata en “buena condición corporal” atravesando el proceso natural de “muda” de piel con numerosas marcas por todo el cuerpo, según explicaron los especialistas. Tras el brote de gripe aviar que ocasionó a nivel local la muerte de 50 lobos marinos, piden dar aviso al Senasa y no acercarse ni tocar a los animales.
Como suele ocurrir para la época del año, dos elefantes marinos fueron registrados en los últimos días en Mar del Plata. El primero de ellos, informaron desde Grupo de Investigación “Biología, ecología y conversación de Mamíferos Marinos”, se registró el domingo en el balneario Torreón del Monje: se trata de una hembra juvenil de aproximadamente 1,5 metros.
El segundo ejemplar fue avistado este lunes en la zona de la Escollera Sur, puntualmente en la playa del puerto. En este caso, se trata de un ejemplar de tamaño más robusto de aproximadamente 2,5 metros totales. Debido a que la parte delantera del cuerpo no se encontraba expuesta, los especialistas informaron que no se pudo constatar el sexo del elefante marino aunque sostienen que probablemente se trate de una hembra adulta.
Ambos ejemplares corresponden al elefante marino del sur “Mirounga leonina” perteneciente a la familia de las focas (Famila Phocidae). Se trata, además, del más grande de los pinnípedos (grupo que incluye a morsas, focas y lobos marinos) y los machos llegan a quintuplicar el peso de las hembras, además de caracterizarse por su marcada proboscis (trompa).
Según informaron desde el grupo de investigación, los dos elefantes marinos se encuentran en buena condición corporal y atravesando el proceso de “muda” de su pelaje con numerosas marcas por todo el cuerpo. Es que, según detallaron, el ciclo de vida anual del elefante marino consta de dos etapas terrestres: una de ellas dedicada a la muda, de diciembre a febrero, y otra dedicada a la reproducción, de septiembre a octubre y principalmente en Península Valdés.
A su vez, detallaron que los elefantes juveniles suelen realizar su muda de piel entre noviembre y diciembre y luego tienen una etapa facultativa de “descanso en la tierra” que puede incluir una o más visitas a la costa sin ninguna función específica. Estas etapas, en todos los casos, son alternadas con la alimentación en el mar.
La muda, aclararon en última instancia, consta de la pérdida total de pelo junto a la capa externa de la piel que se desprende en “grandes parches”. Durante este período, los ejemplares suelen mantenerse en la costa mientras ayunan hasta que el nuevo pelo se desarrolle en su totalidad. Finalizada la muda -que puede durar algunos días- los ejemplares regresan a mar abierto.
A pesar de que la colonia de elefantes marinos de Chubut experimentó un “notable” aumento poblacional en las últimas décadas, los especialistas señalaron que ante el brote de gripe aviar que afectó a un importante número de lobos marinos en Mar del Plata, también se registraron altas cifras de muertes de elefantes marinos.
Según informaron, murieron cachorros de diferentes tamaños, ejemplares adultos en las costas de Península Valdés, y machos y hembras adultos y subadultos. Por ello, desde el grupo de investigación pidieron a la población dar aviso al Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) en caso de encontrarse con un animal y no “tratar de tocarlos ni acercarse”.
En caso de encontrar hallar animal con signos nerviosos o muerto, se puede notificar al Senasa a través de sus canales de comunicación: al número 1157005704, a través de la app “Notificaciones Senasa“, en el apartado “Avisá al Senasa” en Argentina.gob.ar/senasa/, o en las oficinas de la zona portuaria.
