Don Lunfardo llega a Mar del Plata para abrir el mar
La banda platense arriba este sábado al escenario ubicado en Juan B. Justo 620, y uno de los guitarristas compartió detalles en la previa del show. “Hay una comunión muy grande”, se sinceró.
Luego de un año exitoso, la banda Don Lunfardo continúa presentando su reciente disco “Siestas en la cima” y de esta forma llegan este sábado a Mar del Plata con el show “Un guacho espera que abra el mar”, nombre que hace referencia a parte de la nueva obra, la cual está disponible en las plataformas digitales de la banda.
En la previa del show, Roberto Garcilazo, guitarrista de la banda, invitó a los y las marplatenses y turistas que solo hayan escuchado a la banda a que se acerquen para disfrutar del show en vivo. “Hay una comunión muy grande entre la gente que sigue la banda y los músicos, un ida y vuelta constante entre lo que entrega y responde la gente, hay algo muy lindo que se genera”, compartió.
Este sábado a la medianoche, Don Lunfardo y el Señor Otario se presenta en Abbey Road, en Juan B. Justo 620, en lo que será el primer show del año 2019. Las entradas anticipadas pueden ser adquiridas en Drugstore Wonka (Rivadavia y Salta), Musical Norte (San Luis 1787), BPM (Güemes 3096) y Künga Marroquinería (12 de Octubre 3512).
“Siestas en la cima” fue lanzado en el 2018 después de mucho trabajo y a pulmón. Los músicos comenzaron las presentaciones y continuaron trabajando sin pensar mucho en el calendario y es por eso que llegan a Mar del Plata. “Estamos contentos porque salió el disco físico, llevó mucho esfuerzo, mucho laburo y tratando también de planificar un poco. Este año vamos a cumplir 20 años. Una banda independiente que requiere mucho esfuerzo, así que no nos tenemos que distraer mucho para que todo vaya saliendo bien”, señaló el músico, en diálogo con QUÉ Digital.
Desde 2012, la formación de Don Lunfardo es Luciano Angeleri en voz, Marcos Tradatti y Federico Lozano en guitarras, Javier De La Mata en batería, Néstor Arévalo en bajo, Andrés Maillard en teclados y Nacho Giusti en percusión. A ellos, el año pasado, se sumó en tercera guitarra y coros Roberto Garcilazo.
Don Lunfardo y el Señor Otario es una agrupación que nació en la ciudad de La Plata, siempre de manera independiente con determinados gestos y la artística propia de una banda que “va por la colectora artística”, según explicó Garcilazo. Y en este sentido agregó: “Acá en La Plata hay mucho de eso, de bandas gestadas en el under, haciendo las cosas a puro pulmón y es una ciudad muy universitaria. Esas cosas son magnificas, salen cosas que son increíbles”.
La banda tiene una impronta muy propia y no suelen pasar desapercibidos. “Este sábado el público que vaya va a poder disfrutar de un espectáculo único. Cada show, cada presentación responde a una lógica particular en relación al lugar que visitamos, a las palabras, es una banda que le da un valor muy importante y eso va bordeando la parte sonora, lo visual. De por si la entrada es particular empezamos a invitar a la gente, con un poco de show, música y la escenografía está teñida con una escenografía relacionada con eso”, invitó el guitarrista.
– Sin dudas, el sello distintivo de la banda es el lunfardo…
– Sí, hay una lógica distinta. Yo que soy del mundo más de la música, escucho una canción y lo relaciono más con el sonido, a veces no con la lírica. Y desde que estoy con Don Lunfardo me llama mucho la atención, sobre todo con Luciano, porque había que grabar una letra de una canción y por ahí pasaban tres o cuatro horas de acomodar palabras y palabras. Comento esto para que se entienda cuán importante es lo qué se dice y cómo se dice: se seleccionan específicamente las palabras y esa es una de las cosas que hizo que el disco tardara en salir. Pero este Chino (Luciano) es muy detallista, aunque en realidad todos, pero él suele estar más ligado a esa parte y la verdad es algo que a mí me sorprende porque no es común en las bandas de rock que amanecen en las ciudades.
– Todo esto acompañado por el rock que trae la banda, ensamblado con otros géneros…
– Sí, hoy es una banda más rockera, no hay tanto de lo rioplatense como el sello que tenían en una época. Con ocho músicos en escena y por lo menos diez personas más que trabajan en el costado entre escenografía, luces, monitores y sonido, managers y demás, es una familia muy grande en la cual el motor de todo es el cariño y el afecto, bueno el nido artístico que tenemos ahí. La verdad es que hoy somos batería, bajo, dos guitarras eléctricas, teclados, percusión y las voces.
– Después de abrir el mar ¿van a continuar con presentaciones en la costa este verano?
– No, porque venimos de unos meses muy intensos y de un año que un poco más casi nos lleva puestos a todos. Diciembre fue una crisis general, es muy complicado vivir y como banda editamos un montón de cosas para el disco, con un dólar cambiando todo el tiempo. Así que posiblemente hagamos esta fecha y nos vamos a guardar hasta abril para hacer una fecha grande en La Plata.
