El Gato y La Caja: ciencia, educación, arte y diseño
Se trata de un proyecto de comunicación realizado por dos biólogos y un diseñador gráfico. Este sábado, en la Facultad de Ciencias Económicas, presentarán un libro que le quitó solemnidad a la ciencia y la vistió de arte.
Los biológos Pablo González y Facundo Álvarez Heduan se habían juntado con el diseñador Juan Manuel Garrido para intentar fusionar la ciencia con el arte, para quitarle solemnidad y rigurosidad al mundo exacto y acercarlo a la gente. El resultado fue El Gato y La Caja, una web que reuné textos científicos ilustrados, con títulos tan desopilantes como “Quiero matar a mi jefe” (neuro ciencia y arte) o “Tirate a un pozo” (física y gravedad). Este sábado, desde las 18, los tres darán una charla en la Facultad de Ciencias Económicas -Funes y San Lorenzo-, con la excusa de presentar el libro de ese proyecto y, de paso, recolectar juguetes para los chicos del barrio Camet.
Lo que nació como un proyecto web, de notas e ilustraciones se transformó en un libro anuario con los mejor de El gato y la caja. En un golpe de ingenio llamaron al libro Anuario y, para desarrollarlo recaudaron fondos a través de la plataforma idea.me, en la que la gente podía donar dinero para que se llevara a cabo el proyecto. Rompieron record en latinoamérica y pudieron hacer un libro de diseño impecable.
“Es un libro objeto, es un libro bastante poco convencional, es un libro que se lee pero también se mira, se recorre. Lo loco es que nos pusimos a investigar y esto es algo que no existe, no encontramos ningún libro de diseño con intención artística sobre una temática científica. De nuevo, nos metemos en un terreno desconocido para tratar de hacer algo que no se hizo”, dice Juan Manuel.
Todo el proyecto de El Gato y La Caja es un nexo entre la ciencia y el arte, entre investigadores, docentes, escritores e ilustradores. El lado científico genera contenido, y los artistas producir una pieza única para cada una de las notas que se publican. El Gato y La Caja ya acompañó la publicación de decenas de estudiantes de grado, postgrado e investigadores y profesores de universidades nacionales que sentían la necesidad de compartir con el público no científico su forma de ver el mundo.
La entrada para la charla es libre y gratuita, pero los organizadores piden que quienes puedan colabrar lleven un juguete para así festejar el día del niño con los chicos del barrio Camet.
