Radio De la Azotea, 20 años en busca de un “cambio social desde la comunicación”
La radio comunitaria festeja su vigésimo aniversario en pleno “proceso de crecimiento” y destaca el “reconocimiento social” alcanzado.
La radio comunitaria De la Azotea cumple 20 años y ese festejo encuentra a sus integrantes en un pleno “proceso de crecimiento y de empoderamiento”. Desde su primera transmisión realizada el 16 de febrero del 2004 su definición es la de ser un “proyecto político-comunicacional” y esa postura, según plantean, contempla hoy recibir un fuerte “reconocimiento social” y seguir quitando “el estigma” que se tiene desde distintos sectores hacia la comunicación popular. En definitiva, el proyecto sigue en la búsqueda iniciada el primer día: “Generar un cambio social desde la comunicación”.
El festejo de los 20 años para la radio De la Azotea (FM 88.7) será con un gran corso y festival en su sede de la esquina de Don Bosco y Rivadavia este viernes desde las 18, con música en vivo de la mano del grupo “Operación Rosa Rosa” y la participación de las murgas marplatenses “Los Murguientos de Villa Primera”, “Se Atormenta una vecina” y “Lavate y Vamo”. También habrá foodtrucks con precios populares y sorteos.
Lourdes Michique integra hace dos años el equipo de gestión que, de manera horizontal, trabaja para el sostenimiento de la radio, hoy conformado por nueve personas. Y explica que este vigésimo aniversario encuentra al medio y al proyecto en una “etapa nueva” de la mano de un “proceso de crecimiento”, desde un “posicionamiento mucho más competitivo”, de un “empoderamiento como radio comunitaria, como espacio que alberga otras voces” y “con un equipo consolidado” que todo el tiempo “aporta a construir un espacio de comunicación popular y participativo”.
En esa búsqueda la radio desde su nacimiento se definió como un proyecto político-comunicacional. “Por los micrófonos pasaron cientos de personas de distintos ámbitos: vecinas, vecinos, referentes de organizaciones, estudiantes de todos los niveles; personas con y sin formación periodística que tenían mucho para decir. Ellas y ellos contaron sus propias realidades, sin intermediarios y en búsqueda de generar un cambio social desde la comunicación“, definen sus integrantes.
(Foto: archivo / Qué digital)
¿Qué implica ser un proyecto político-comunicacional? “Somos un proyecto político porque nos posicionamos, porque tenemos una voz propia, porque tenemos una intención de transformar la realidad en la que habitamos, no nos pasa desapercibido lo que pasa en un barrio, lo que le pasa a una vecina, lo que al resto de ciudadanos y ciudadanos les duele, tenemos un posicionamiento muy claro frente a eso. Asumimos la responsabilidad de lo que significa comunicar y es una decisión política abrir el micrófono, generar una pluralidad de voces, no cerrar la posibilidad de poder decir, porque es una necesidad y un derecho”, define Lourdes Michique.
Y completa: “Si nosotros tenemos las herramientas para poder hacerlo, bienvenido sea poder abrir el camino para que otras personas puedan hablar y puedan expresarse y que no haya una limitante en torno a ello ya sea económica, de conocimientos, del lugar y la forma en la que se hace la comunicación sino que vamos hacia los barrios, gestionamos las capacitaciones necesarias, abrimos los micrófonos y damos entidad a aquello que para el otre es importante”.
Desde el equipo de gestión, en ese sentido, plantean que a lo largo de los 20 años De la Azotea fue cambiando en quienes integraron el proyecto, de sedes edilicias y de realidades políticas y económicas pero señalan que “lo nunca se modificó es la impronta fundacional: disputar la construcción de los sentidos, estar en el territorio, brindar capacitaciones, una radio de puertas abierta a aquellos y aquellas que quieren hacer radio para transformarlo todo”.
En el último año y medio las y los integrantes de la radio iniciaron “una mirada retrospectiva” para valorar y terminar de asumir el “acompañamiento y aval de la comunidad” hacia el proyecto y el crecimiento consolidado también en base al desarrollo y al equipamiento conseguido para el medio. “Nuestra comunidad es tan grande que fue lo que hizo poder terminar de formarnos, de equiparnos, de armar un estudio en condiciones hermosas, con tecnología que quizás uno no espera encontrarse en un medio de comunicación comunitario, y este último tiempo pensamos en potenciar todo eso”, define la comunicadora.
Y remarca que para todas aquellas personas que integran el proyecto “es un gran honor, un orgullo, ser una radio comunitaria”: “Hay que quitar un poco el estigma que se tiene sobre lo que representa la comunicación popular”, define y reflexiona: “Hoy quizás en este contexto tan hostil, donde existe para otros medios y otros espacios una crisis que los puede movilizar, nosotros tenemos las necesidades que tienen los otros medios también pero venimos con una base contundente, un recorrido y redes comunitarias que nos contienen. La diferencia está en el reconocimiento social, el aval, la espalda que por ahí los otros medios no lo pudieron gestionar o no ha sido su búsqueda”.
