Alvarado consiguió su primer triunfo y algo de oxígeno después del duro golpe
El “Torito” logró reponerse de la histórica goleada en contra y venció por 2 a 1 a Güemes de Santiago del Estero. Algo de tranquilidad y desahogo para Vigevani y el plantel.
Alvarado de Mar del Plata necesitaba reponerse después de lo que fue la goleada en contra sufrida el lunes pasado ante Patronato y eso fue lo que logró este sábado al vencer por 2 a 1 a Güemes de Santiago del Estero en el estadio José María Minella por la sexta fecha de la Zona A de la Primera Nacional.
Una victoria que significa mucho no solo porque es la primera que logra en la temporada sino porque lleva algo de tranquilidad para el entrenador César Vigevani y el plantel tras una histórica derrota que siempre deja secuelas. Y tan importante fue el triunfo que se sintió el desahogo del público que se ubicaba en el sector norte del estadio mundialista una vez que el árbitro realizó el pitido final del encuentro.
El conjunto marplatense golpeó en los momentos justos ya que Mauro Albertengo marcó sobre el final de la primera parte mientras que Guido Vadalá estiró la diferencia en el inicio del complemento. Cuando todo parecía indicar que la visita iba a sentir los golpes, logró descontar minutos más tarde gracias a Lucas Cano, pero finalmente los 3 puntos se lo quedó el dueño de casa y el grito final de los y las hinchas así lo reflejó.
El primer tiempo fue muy mal jugado pero también tuvo situaciones de peligro a partir de errores defensivos claves por parte de ambos conjuntos. La primera fue a los 3′, luego de un grueso error por parte de Nicolás Ortíz, lo que generó una clara para la visita ya que la dejó a merced para Maximiliano Casa, pero a éste al controlarla se le fue algo abierta y le dio la oportunidad al central para que remendara su equivocación y llegó a barrer con la justo para despejar el remate.
Recién a los 30′ el Torito creó la más clara por la derecha pero el arquero achicó bien y la envió al córner. Justamente después de ese lanzamiento de esquina se inició la gran polémica de la tarde-noche marplatense: Lamardo la dejó corta y provocó la contra de los santiagueños, que aprovecharon el mal posicionamiento defensivo del local y el jugador de Güemes quiso asistir con un pelotazo cruzado directamente al área rival pero Olivera, que quedó como último hombre, estiró su brazo groseramente y la pelota le pegó en esa extremidad prohibida del cuerpo. Ante esto, increíblemente ni el árbitro del encuentro ni el línea número 1 cobraron el claro penal.
Minutos más tarde, nuevamente la visita estuvo cerca de ponerse en ventaja pero el cabezazo de Vera cruzó por todo el arco y la pelota se fue muy cerca del palo izquierdo defendido por el arquero Lungarzo.
Y cuando parecía que la primera parte moría en un 0 a 0, el central Facundo Díaz cometió tan grave error al no poder controlar ni interceptar la pelota, algo que aprovechó a la perfección Mauro Albertengo, quien con una sutil definición marcó el 1 a 0 en el primer minuto del tiempo añadido. El tanto del Torito levantó a un público que comenzaba a impacientarse, principalmente porque estaba la herida muy abierta por la goleada sufrida en la fecha pasada.
Más allá de algunas dudas defensivas en el inicio del complemento, el conjunto de César Vigevani hizo que desaparecieran cuando el laborioso Albertengo la bajó con la cabeza para la llegada en la puerta del área de Vadalá, que con un potente y bien direccionado zurdazo estiró la diferencia en el marcador y estableció el 2 a 0 a los 53′.
Güemes pareció por algunos minutos sentir el golpe pero todo cambió en una jugada. A los 65′ el experimentado de Alvarado José Luis Fernándezndesde la izquierda quiso tirar un centro pero la pelota tomó tal comba que sorprendió a propios y extraños y pegó en el ángulo. En esa misma jugada, el Gaucho con paciencia se plantó en campo contrario y encontró un espacio por el sector izquierdo y allí el recién ingresado Lucas Cano definió al primer palo donde no llegó Lacunza. Allí, no solo le descontaron a Alvarado sino que el equipo también sufrió la lesión (al parecer muscular) de su mejor defensor, Alan Robledo, quien inmediatamente dejó el rectángulo de juego e ingresó Tomás Berra.
Pero a pesar de que este cimbronazo podía haber sido clave en el encuentro, Alvarado pudo aguantarlo, aunque el rival no tuvo demasiadas ideas y la necesaria victoria finalmente se la quedó el conjunto marplatense.
Ya con algo más de oxígeno para que el entrenador César Vigevani pueda trabajar en la semana, el próximo encuentro del conjunto marplatense será el lunes 20 de marzo cuando desde las 21.10 visite a Deportivo Morón. El partido se disputará en el estadio Nuevo Francisco Urbano y será televisado por la señal TyC Sports.
Alvarado (2): Juan Manuel Lungarzo; Mariano Bettini, Alan Robledo, Nicolás Ortíz y Luis Olivera; Gonzalo Lamardo, Julián Vitale y José Luis Fernández; Guido Vadalá y Mariano Barbieri; Mauro Albertengo. DT: César Vigevani.
Güemes (1): Juan Pablo Romero; Mauro Zurita, Facundo Díaz, Matías Escudero y Gonzalo Gamarra; Matías Vera, Camilo Albornoz, Matías García y Maximiliano Casa; Iván Maggi y Alexis Vega. DT: Walter Perazzo.
Cambios: 45′ Sebastián Carruega por Escudero, 59′ Lucio Almada y Lucas Cano por Maggi y Vega, 66′ Iván Santa Cruz por Casa, 79′ Matías Sosa por Vera (G); 68′ Tomás Berra por Robledo -lesión-, 73′ Franco Bellocq, Ramiro Makarte y Sebastián Ramírez por Vitale, Barbieri y Albertengo, 75′ Leandro Lacunza por Bettini -lesión- (A).
Amonestados: 77′ Vadalá, 85′ Robledo, 90′ Bellocq, 90+1′ Fernández (A); 77′ Almada, 90+1′ Gamarra (G).
Goles: 45′ Albertengo, 53′ Vadalá (A); 66′ Cano (G).
Árbitro: Nelson Bejas.
Estadio: José María Minella.
