Mastromarino: “Todavía no caigo”
Finalizaron los Juegos Panamericanos de Toronto, en el que los marplatenses hicieron su aporte al medallero, como el caso del “Colo”, quien sumó un bronce histórico en el maratón. La palabra del atleta, que ahora busca la clasificación a los Olímpicos de Río de Janeiro.
Los hermanos Brian y Cristian Rosso, el patinador Ezequiel Cappellano y Mariano Mastromarino han sido los marplatenses más destacados en Toronto 2015. Pero el “Colo” logró reposicionar al atletismo en los primeros planos de los Panamericanos. Es que luego de 64 años un argentino logra subirse al podio en esta prueba. Los únicos, habían sido Delfo Cabrera y Reinaldo Gorno, medallistas de oro y plata respectivamente en los primeros Panamericanos en Buenos Aires 1951.
El atleta marplatense alcanzó la medalla de bronce en el maratón de los Juegos Panamericanos con un tiempo de 2 horas, 17 minutos y 45 segundos. La competencia, se desarrolló en una zona céntrica de Toronto a orillas del Lago Ontario denominada “Ontario Place West Channel”. El circuito estuvo dividido en una primera vuelta de 2 kilómetros y luego se completó con cuatro más de 10 cada una por la zona de High Park, un parque muy grande en Toronto, en el cual el terreno tiene pendientes.
La carrera contó con la participación de 17 atletas aunque cuatro tuvieron que abandonarla por diferentes situaciones físicas. Además, la prueba tuvo un corredor descalificado previamente, el chileno Cristopher Guajardo porque dio positivo en un control de doping.
Una vez finalizado el maratón, Mastromarino analizó la competencia. “Fue una carrera muy dura por el circuito, el calor y la humedad, pero por suerte tuve la cabeza para hacer mi trabajo sin preocuparme en el resto. Los primeros 6 o 7 kilómetros, íbamos todos juntos y ahí empezaron a correr en un ritmo muy fuerte, que no me convenía porque sabía que más adelante no podría aguantarlo. Deje que se vayan y seguía manteniendo mi ritmo, que me dio resultados”, dijo el “Colo” a la periodista marplatense Julia Caro.
Y luego agregó: “Todavía no caigo, por cómo se dio la carrera. A falta de los últimos 4 kilómetros, lo veía muy lejos, pensaba que no lo iba a lograr. Estoy muy emocionado, porque es mucho el trabajo que hacemos para estar en este nivel y que dé sus frutos. Se dio una carrera lenta y no conseguí la marca para los Juegos de Río, pero no bajamos los brazos. Descansaré unos días y volveremos a prepararnos para ir a buscarla”. La marca mínima para las Olimpiadas es de 2h17m.
Malgor, emocionado
El que se mostró en todo momento expectante durante la prueba, fue su entrenador Leonardo Malgor, quién no dejaba de hacer anotaciones siguiendo de cerca la prueba desde las pantallas de la llegada.
Con lágrimas en sus ojos por la felicidad que esto representa comentó “si bien uno lo sueña como entrenador, acompañando el proceso del atleta, hacerlo realidad es muy difícil. Ahí ya no sólo depende de uno mismo, sino que todo influye: rivales, circuito, clima, cómo te hayas preparado y cómo te sientas ese día. Acá abandonó gente de un nivel técnico superior a Mariano, que sintieron mucho más que él la prueba. Otro como el mexicano Daniel Vargas que se veía con la de bronce asegurada la perdió en la llegada (en el último tramo venía por delante de Mastromarino, disminuyó su marcha y terminó cuarto). Mariano ya nos tiene acostumbrados a estos finales, en donde remata en los últimos metros. Se guarda un resto para la recta final teniéndonos a todos en vilo”.
