Avanza la candidatura del marplatense Julio Aro al Premio Nobel de la Paz
La candidatura del impulsor de la identificación de los soldados argentinos enterrados en Malvinas y excombatiente fue aceptada por el comité organizador.
La candidatura del marplatense Julio Aro al Premio Nobel de la Paz impulsada por la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) avanza y en las últimas horas logró la aceptación del comité organizador del galardón internacional entregado anualmente en Oslo, Noruega.
Desde hace años, y tras haber conseguido avales de distintos ámbitos como el Concejo Deliberante y el Senado, la Universidad busca que el trabajo de Aro en relación a la identificación de excombatientes fallecidos en la Guerra de Malvinas y enterrados en el archipiélago austral, tenga su reconocimiento mundial.
Y ahora, este lunes desde la Universidad informaron que su solicitud de postulación fue aceptada por los organizadores del reconocido premio, y se mantienen a la espera de que el marplatense finalmente llegue a la selección final y pueda competir por el Nobel.
Cabe recordar que junto al marplatense -que además de ser excombatiente de Malvinas también preside la Fundación “No Me Olvides”– se encuentra Geoffrey Cardozo, británico que trabajó junto a Julio Aro por impulsar el proceso de identificación de los soldados argentinos enterrados en el cementerio de Darwin, en las Islas Malvinas.
“Estamos muy contentos y felices por esta nominación, más allá de que siempre decimos que ganamos el Premio Nobel porque tenemos la nobleza de esa mamá o papá que dice ‘gracias hijo’. Esta postulación, tal vez, nos sirva para poner la causa un poco más arriba y para seguir buscando estas familias que faltan”, sostuvo Aro, conocida la noticia, en diálogo con Qué digital.
Julio Aro y Geoffrey Cardozo (Foto: Marcelo Nuñez)Cabe recordar que Argentina tiene hasta el momento dos Premios Nobel de la Paz: Carlos Saavedra Lamas, galardonado en 1936, y Adolfo Pérez Esquivel, en 1980. Saavedra Lamas -canciller y político- obtuvo el galardón por su labor fundamental en el logro de la paz entre Bolivia y Paraguay, protagonistas de la Guerra del Chaco, entre 1932 y 1935.
Por su parte, el arquitecto Pérez Esquivel -prisionero de la última dictadura militar y destacado defensor de los derechos humanos- fue premiado por sus acciones contra ese régimen de facto y la búsqueda de justicia por los crímenes de lesa humanidad cometidos por las Fuerzas Armadas y la población civil.
