Gastronómicos y hoteleros piden declarar “desastre económico” en Mar del Plata
La asociación empresaria del sector realizó una presentación ante el Municipio y la Provincia. Señalan que la crisis afecta a 1800 establecimientos gastronómicos y más de 500 hoteles.
Al exponer la “imposibilidad de las empresas de sobrevivir” en el contexto actual de cuarentena por el coronavirus “aún frente a las aperturas graduales y al señalar que “Mar del Plata genera trabajo en la hotelería y gastronomía a 30.000 familias”, desde la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica pidieron a las autoridades locales y provinciales la necesidad de que se declare “desastre económico turístico” en la ciudad a partir de la realidad en la que se encuentra el sector.
La asociación realizó en las últimas horas presentaciones ante el intendente Guillermo Montenegro, a los concejales de la ciudad y al gobernador Axel Kicillof con el objetivo de declarar el “desastre económico turístico del Partido de General Pueyrredon”.
El documento expresa que el sector representado está en “estado de emergencia, virtualmente paralizado desde hace más de 70 días y sin posibilidades de una reapertura en el futuro inmediato”.
Según los datos brindados desde la asociación empresarial en Mar del Plata hay más de 1800 establecimientos gastronómicos de distintas modalidades y más de 500 hoteles de todas las categorías. Y describieron “que se caracterizan por altos costos fijos, con mano de obra intensiva, generadora de empleo como ninguna otra actividad en el mundo”.
Además, plantearon que se trata de “empresas pymes y familiares en más de un 90% que enfrentan una realidad acuciante” ya que encuentran sus niveles de facturación en cero o en una “ínfima” cifra de su caja habitual.
“Vemos con honda preocupación la imposibilidad de las empresas de sobrevivir a estas restricciones aún frente a las aperturas graduales, donde la disminución en el volumen de ventas derivada de las limitaciones en materia de afluencia de público (ya sea por la necesidad de reducir la capacidad de los salones o por la crisis económica que afronta la sociedad) termine profundizando los cierres definitivos”, advirtieron.
Y afirmaron que “una Mar del Plata que genera trabajo en la hotelería y gastronomía a 30.000 familias necesita de la Provincia y la Municipalidad, para que en que esta oportunidad se dé respuesta a reclamos de larga data pero que hoy resultan imprescindibles para evitar el derrumbe de la actividad”.
En el caso del sector gastronómico esta semana se llevó a cabo una prueba en vivo de los protocolos que son confeccionados de manera conjunta por empresarios, gremios y el gobierno municipal para evaluar su impacto a aplicar en un futuro cuando se permita el regreso limitado de la actividad. Mientras esa espera se mantiene, desde la asociación empresarial sostuvieron que se “han agotado las posibilidades de financiación, lo que se encuentra agravado con la imposibilidad de proyectar la reapertura”, y remarcaron saber que esto último “no ocurrirá en un futuro cercano”.
