Lunes 29 de abril | Mar del Plata
15/02/2017

Otero podría perder la concesión de la Terminal de Mar del Plata

El empresario socio de Florencio Aldrey Iglesias condenado por la Justicia por dar dádivas a Ricardo Jaime perderá la explotación de Retiro por disposición del Ministerio de Transporte. Su empresa, TEBA, podría también dejar de explotar la Ferroautomotora.

Otero podría perder la concesión de la Terminal de Mar del Plata
(Foto: archivo / QUÉ Digital)

El Ministerio de Transporte de la Nación lanzó días atrás una licitación pública para buscar un nuevo concesionario para la terminal de Retiro; y así dejar atrás a la empresa que la explota desde hace 23 años, la firma Terminal de Buenos Aires (TEBA), de Néstor Otero, condenado por la Justicia por pagar sobornos al exsecretario de Transporte del kirchnerismo Ricardo Jaime. La decisión política pone en riesgo a la vez su continuidad a mediano plazo como concesionario de la estación Ferroautomotora de Mar del Plata, según pudo saber QUÉ.

En mayo 2016 se venció el contrato de TEBA para explotar Retiro, pero el gobierno de Mauricio Macri lo extendió por un año más. Ahora -días atrás- mediante el decreto 49/2017, el Ministerio de Transporte de la Nación comunicó que se llamó a licitación pública para un nuevo concesionario por un plazo de 20 años: la apertura de sobres será el 6 de abril para las ofertas técnicas y el 16 de mayo para las económicas. Luego, la adjudicación se haría entre junio y julio.

La inversión prevista para el predio de 7 hectáreas lindero a la villa 31 sería superior a los 500 millones de pesos y la idea del Ministerio es que Nación transfiera el control de la terminal a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, bajo la administración de Horacio Rodríguez Larreta.

El fin de los tiempos en Retiro de Otero, uno de los principales aportantes de fondos en campañas electorales del Frente para la Victoria, sería prácticamente un hecho.

La relación de Néstor Otero con Mar del Plata es directa. El empresario investigado, imputado, procesado y condenado por la Justicia no solo es socio del empresario Florencio Aldrey Iglesias sino que además es el concesionario de la estación Ferroautomotora, de Luro y San Juan, desde que la misma se adjudicó para ser construida.

En agosto de 2004, el entonces presidente de la Nación, Néstor Kirchner, anunció la construcción de la nueva estación de Mar del Plata, con un costo a cargo del Estado nacional de 170 millones de pesos. A fines de 2006, el Gobierno anunció que la beneficiada sería la empresa integrada por Néstor Otero y el grupo Emepa-Ferrovías.

Desde el primer momento el desembarco de Otero en la ciudad causó malestar en múltiples sectores. Varias denuncias judiciales fueron presentadas en su contra por vecinos de Mar del Plata, pero sin dudas fue su fraudulenta relación con Ricardo Jaime lo que lo puso bajo la lupa de la Justicia.

paro bus terminal 008

Fuentes del Ministerio de Transporte de la Nación informaron a QUÉ que además de perder la concesión de la terminal de Retiro -donde había comenzado en los ’90 a explotar locales gastronómicos de la empresa Micro’s y luego fundó TEBA junto a otros empresarios a los que Carlos Menem les entregó el control de toda la terminal- hoy también está en duda la continuidad del polémico Néstor Ostero como concesionario de la estación Ferroautomotora de Mar del Plata, donde aún no volvió a funcionar el tren: la circulación de las unidades continúa suspendida desde agosto de 2015.

OTERO, A LA JUSTICIA

En mayo de 2010 el diario El Atlántico publicó a partir de datos recabados que dos “subordionados” de Néstor Otero aparecían como “garantes en dos contratos de alquiler” del ex secretario de Transporte del kirchnerismo, Ricardo Jaime.

Para rubricar los alquileres de los departamentos de Ricardo Jaime y su pareja Elena Reyss, quienes salieron de garantes fueron justamente dos directivos de TEBA, de la cual es presidente Néstor Otero.

Se trataba de Edgardo Darío Preiti (ex vicepresidente de TEBA) y Gabriel Ignacio Akerman (otro directivo de la empresa), quienes respaldaron con sus bienes la posibilidad de que Jaime o su pareja evitasen pagar el alquiler.

Según el expediente judicial, el ex funcionario kirchnerista alquilaba un inmueble sobre la avenida Libertador por el cual pagaba por contrato 14 mil dólares mensuales. Sin embargo el departamento correspondía a la firma Frans Bels, del ex futbolista Fernando Redondo, y Akerman figuraba como “fiador liso y llano”, lo que implicaba que si no pagaba Jaime, debía pagar Akerman.

Algo similar ocurría con un departamento en Capital Federal, por el que Reyss debería pagar 1.200 pesos. El inmueble correspondía también a la misma empresa pero el garante era Preiti.

Ambos garantes son dos subordinados de TEBA y por lo tanto de Néstor Otero, quien renegoció -a partir de dos puntos polémicos -con el ex secretario de Transporte la concesión de Retiro: se prorrogó el negocio hasta septiembre de 2015 y a su vez se redujo de 400 mil a 100 mil pesos mensuales el canon que el concesionario debe abonar al Estado.

Paradójicamente, a fines de 2013 Néstor Otero pasó a ser el propietario de lo que quedó del Diario El Atlántico tras el vaciamiento iniciado por el Grupo Crónica en complicidad con Florencio Aldrey Iglesias. 

Otero se quedó con el 25% del paquete accionario de la empresa que lleva el nombre “Editorial Arena del Atlántico SA” y a partir de la obtención de publicidad oficial habría saldado viejas deudas con su socio, el dueño de Multimedios La Capital, “El Gallego” Aldrey Iglesias.

El empresariado nacional y local de los medios, gracias al apoyo publicitario de pautas oficiales de políticos que miraron para otro lado y al de una oposición que nunca supo estar en contra de los que tienen poder, se cargó a un medio de 77 años de historia y a 44 personas que trabajaban ahí.

OTERO, IMPUTADO

En septiembre del 2016, el fiscal federal Franco Picardi formuló el requerimiento de instrucción e imputó por posible lavado de activos a Néstor Otero, dándole impulso a la acción penal tras la presentación de una investigación preliminar realizada por la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), a cargo de los fiscales Gabriel Pérez Barberá y Laura Roteta.

De acuerdo al requerimiento, Otero “habría desplegado una serie de operaciones cuestionadas sirviéndose de las firmas TEBA SA, Nueva Estación Once S.A., Ricos Sabores SRL, Cosas Dulces S.A., Terminal de Mar Del Plata S.A., Haras Dilu S.A., con la presunta connivencia del Banco Saenz S.A. –entidad bancaria a través de la cual operaba-”.

“El análisis integral de los antecedentes colectados le ha permitido a la Procuraduría especializada suponer la presencia de conductas que podrían hallar su encuadre típico en el delito de lavado de activo de origen delictivo, administración fraudulenta y/o insolvencia procesal fraudulenta o fiscal”, reseñó Picardi.

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) informó que, en agosto de 2014, “Otero habría realizado 39 transferencias a través del medio electrónico de pagos (MEP) desde su cuenta corriente personal del Banco Sáenz SA, por una suma total de $ 7.480.000 con destino a cuentas de las empresas Terminal Mar del Plata SA -TEBA SA-, Nueva Estación Once SA, Ricos Sabores SA, Haras Dilu SA y Cosas Dulces SA”, todas ellas abiertas en el Banco Macro SA y en las cuales posee participación accionaria.

OTERO Y UN “ACUERDO” ANTES DEL JUICIO ORAL

Otero fue procesado y enviado a juicio oral y público por el ex juez federal Norberto Oyarbide, una vez constatado que le había pagado los alquileres de dos departamentos a Jaime mientras era funcionario público, por medio de TEBA.

Según consta en la resolución judicial, se corroboró también que el cuñado de Otero, Raúl Glories, había comprado una propiedad dentro de un barrio cerrado de San Isidro que usaba Jaime y que pasó a nombre de María Filomena Pfaffen, madre de la expareja del funcionario.

Sin embargo, según informó el portal Lapoliticaonline, cuando estaban a un paso de ir al tribunal oral, en octubre del año pasado, Jaime y Otero llegaron a “un acuerdo” con el fiscal federal Guillermo Marijuan, por cual admitieron el delito de “aceptación de dádivas” a cambio de un juicio abreviado que incluyó el pago de compensaciones económicas y la realización de tareas comunitarias.

En el caso de Otero, el pacto -que fue ratificado por el juez federal, Julián Ercolini- implicó el desembolso de 785.000 pesos para un comedor comunitario y “obras benéficas y una serie de tareas sociales en un jardín de infantes de la villa 31”.

TERMINAL 01

(Foto: archivo/QUÉ Digital)

Si bien Otero logró quedarse -bajo la gestión de Macri- con la operación y manejo de la nueva estación de ómnibus de Villa Soldatti, hoy la licitación impulsada por el Ministerio de Transporte le sacaría la histórica concesión de Retiro, mientras en simultáneo el Gobierno puso en duda su continuidad como concesionario de la terminal Ferroautomotora marplatense, sin trenes funcionamientro desde hace 18 meses.

Ver más: , , , , , , , , , ,

15/02/2017