Tras el temporal, se derrumbó parte de un acantilado en la zona sur
Fue en el sector comprendido entre los balnearios Luna Roja y Siempre Verde. Desde la Unión de Guardavidas Agremiados (UGA) advirtieron por el peligro y cuestionaron la falta de señalización en la playa.
En consonancia con las denuncias a partir de la situación de abandono, falta de mantenimiento e intervención del Municipio en los espacios públicos de la zona sur de la ciudad, desde la Unión de Guardavidas Agremiados (UGA) advirtieron por el peligro ante un nuevo derrumbe en parte de un acantilado, en este caso en el sector comprendido entre los balnearios Luna Roja y Siempre Verde.
Según pudo saber QUÉ Digital, en las últimas horas –y como consecuencia del intenso temporal que azotó a la ciudad y que generó numerosos inconvenientes- “la alta marea y las olas socavaron bastante el acantilado en una zona de fácil derrumbe”.
Entonces, como consecuencia de esta situación, y según informaron los guardavidas que realizan tareas en la zona “sucumbió una parte del acantilado de arriba, ya que hubo un desmoronamiento de la tosca del acantilado”.
De todas formas, dado que el desprendimiento se produjo durante la noche, desde la UGA destacaron que “afortunadamente” no hubo mayores inconvenientes, teniendo en cuenta que el sector comprendido entre los balnearios Luna Roja y Siempre Verde es muy frecuentado por marplatenses y turistas.
“Es una zona donde de día hay mucha gente, y aún no hay ninguna señalización advirtiendo el peligro de derrumbe por parte de la Municipalidad”, cuestionaron al referirse a la necesidad de señalización y control por parte del Estado, pero no solo en los accesos linderos a la ruta o en los accesos a los balnearios, sino también en las playas.
Hace tan solo unos días, vecinos y vecinas de la zona sur expusieron su preocupación a partir del desmoronamiento registrado en una de las playas públicas más transitadas de Acantilados y la poca intervención del Municipio ante la problemática, ya que se desprendió un importante sedimento rocoso que cayó sobre la escalera que utilizan los bañistas que se acercan a disfrutar de la playa.
Esto, teniendo en cuenta la tragedia ocurrida el año pasado en la zona de Camet, cuando una nena de 2 años y 8 meses perdió la vida tras caer sobre ella parte de un acantilado. A partir de lo sucedido, el Municipio comenzó con la señalización con carteles que advierten “Peligro de derrumbe”, pero los vecinos –en especial de la zona sur- aseguran que no se hizo lo suficiente.
Sin ir más lejos, el verano pasado la Asamblea por los Espacios Públicos decidió iniciar una campaña para generar y colocar cartelería para proteger a ciudadanos y turistas. “Desconocen los peligros que genera el abandono en muchos de los lugares que compartimos durante esta temporada”, habían advertido en ese entonces y los reclamos se mantienen en este 2019.
