Juzgan a un joven que chocó y mató sin carnet y borracho
Martín Batista es juzgado por la muerte de un hombre de 62 años tras un choque producido en Matheu y Las Heras en mayo de 2015. Buscan que se lo condene por “homicidio simple”
El joven de 18 años que chocó y mató el 23 de mayo de 2015 en Matheu y Las Heras a un hombre de 62 años mientras conducía sin carnet y alcoholizado comenzó a ser juzgado este miércoles en el Tribunal Oral en lo Criminal Oral Nº4 acusado por “homicidio simple con dolo eventual”, que supone una pena de prisión de entre 8 y 25 años. De manera alternativa, la fiscalía planteará la calificación de “homicidio culposo”.
El hecho ocurrió el 23 de mayo de 2015 alrededor de las 5.30 de la madrugada. La víctima, Rodolfo Goyoaga, conducía un Volkswagen Bora y, cuando estaba cruzando por la intersección de Las Heras y Matheu, fue embestido por un Volkswagen Gol conducido por Martín Batista, que le impactó en la puerta del conductor.
Tras el choque, el Gol volcó y quedó en la mitad de la calle, mientras que el Bora terminó en la vereda y su conductor falleció prácticamente al instante. Batista fue llevado de urgencia al Hospital Interzonal. Luego se constató que el joven circulaba con 1,38 de alcohol en sangre, cuando el máximo permitido es de 0,5. y que, además no tenía tramitada su licencia de conducir.
El fiscal de la unidad de Delitos Culposos, Pablo Cistoldi, imputó a Batista a lo largo de la investigación por “homicidio con dolo eventual” y, subsidiariamente, “homicidio culposo”. Esta doble imputación, según el fiscal, busca “abarcar todas las aristas” para que, si durante el juicio que se inició este miércoles alguna queda nula, se pueda continuar con la otra y no sea necesario realizar otro debate.
“Este hecho tiene la particularidad de que no es un accidente, es claramente homicidio: circulaba a 105 kilómetros por hora por calle Las Heras, alcoholizado y sin licencia de conducir. Sabía muy bien lo que iba a hacer, conocía las consecuencias de su accionar”, remarcó el abogado de la familia Goyoaga, Maximiliano Orsini.
“Tanto el particular damnificado como la fiscalía vamos a intentar probar que ese señor actuó con plena conciencia de sus actos y debe cuadrase su accionar dentro de lo que es el homicidio simple con dolo eventual. Esto no es un homicidio culposo, no fue un accidente, se pudo haber evitado. Fue claramente un homicidio y la familia desea que este señor cumpla la pena de cumplimiento efectivo“, señaló el abogado.
En cuanto a la calificación, Orsini remarcó que este caso “tiene como antecedente el caso Nicuez, que fue una bisagra en estos temas de siniestros viales”. En este sentido, recordó que en ese caso Juan Carlos Belasco fue condenado a ocho años de prisión, justamente por el delito de homicidio simple con dolo eventual.
“Hay un cambio de criterio de parte de la fiscalía actuante en identificar lo que es un accidente, lo que es un homicidio culposo y lo que es un homicidio simple con dolo eventual. No todo es un homicidio culposo, la gente tiene que atender que hay que arbitrar todos los medios y diligencias necesarias a la hora del manejo y claramente una persona que viene a 105 kilómetros por hora por una calle urbana, alcoholizada, sabía muy bien que podía matar y ahora deberá hacerse responsable“, apuntó.
