Municipales: paro, pintadas y denuncias de “accionar violento”

En el marco de la retención de tareas que llevan adelante los trabajadores, aparecieron pintadas con el mensaje “Sin paritarias no hay temporada”. Arroyo acusó a un “grupo minúsculo” y repudio las “acciones intimidatorias”.

En el marco de la retención de tareas que llevan adelante los trabajadores municipales, este martes aparecieron pintadas en diferentes paredones de la ciudad con el mensaje “Sin paritarias no hay temporada”.

El intendente Carlos Arroyo, a través de las redes sociales, se refirió a estas pintadas, a las que calificó como un “accionar violento” y apuntó contra “un grupo minúsculo” del Sindicato de Trabajadores Municipales, a quienes “se les han terminado los privilegios con que gozaron durante muchos años, cobrando sueldos sin desarrollar sus tareas correspondientes”.

Las pintadas aparecieron en una nueva jornada de protesta de los empleados municipales. Los delegados del sindicato rechazaron la última propuesta salarial que ayer le llevaron al Ministerio de Trabajo las autoridades del Municipio al vencerse la conciliación obligatoria. Así, luego de la reunión, anunciaron una retención de tareas que se lleva a cabo este martes, en el marco de un conflicto que ya lleva largas semanas de roces, acusaciones y polémica.

“Lamento este accionar, porque esta gestión es la que ha logrado como ninguna otra que desde hace mucho tiempo los haberes de los empleados municipales se depositen en tiempo y forma y se paguen con recursos propios sin ayudas económicas externas”, comunicó el intendente y destacó que su gestión “ha logrado defender ese derecho cumpliendo con lo que promete”.

Desde el Sindicato no ven esa buena predisposición y cumplimiento que refirió Arroyo y por el contrario manifestaron que “toda esta paritaria es una payasada por parte del Ejecutivo y una falta de respeto permanente al trabajador municipal y por eso durante la temporada seguramente verá a sus hijos parados frente a la Municipalidad reclamándole al intendente su legitimo derecho de un salario digno”.

Al día siguiente de esas declaraciones, Mar del Plata amaneció con pintadas sobre algunos paredones con mensajes alusivos a ese punto: la extensión del conflicto y la proximidad de la temporada.

El intendente Arroyo cuestionó el proceder del sindicato y, haciendo referencia una vez más a la pesada herencia -luego de cumplir 36 meses en la gestión- siguió: “Mi responsabilidad es con todos los vecinos de la ciudad y por ello no puedo comprometerme con algo que no puedo cumplir y que pondría en riesgo la economía del Municipio como han realizado otras gestiones, dejando un municipio quebrado como el que nos tocó heredar hace tres años y que con mucho esfuerzo estamos poniendo de pie”.

Por último, el jefe comunal reafirmó: “El único camino que transito y seguiré transitando es el camino de la verdad, quizás sea una buena oportunidad para quieres realizan este tipo de acciones intimidatorias puedan decirle a la ciudadanía en general cuáles son los objetivos que realmente persiguen”