A 38 años de Malvinas: un “mensaje de resiliencia” de excombatientes ante la pandemia
En el Día del Veterano y de los Caídos en Malvinas, desde el centro de excombatientes de Mar del Plata plantearon que “el heroísmo y coraje” debe ser “reinterpretado en virtud de la circunstancias”.
Cuando se cumplen 38 años del inicio de la la Guerra de Malvinas y se conmemora el Día del Veterano y de los Caídos en Malvinas, desde el Centro de Ex Soldados Combatientes de Mar del Plata emitieron un discurso al haber suspendido todas las actividades oficiales por la emergencia sanitaria por el coronavirus. Y, en ese sentido, en el documento dijeron querer brindar “un mensaje de resiliencia hacia nuestros vecinos” y pidieron tomar “la inspiración de aquellos que creyendo en nosotros dieron su vida por la patria”.
El presidente del Centro de Ex Soldados Combatientes de Malvinas de Mar del Plata, Mariano Garbini, expresó en el discurso oficial elaborado desde la institución los sentimientos generados al cumplirse 38 años de un 2 de abril “que diera inicio a una serie de acontecimientos que marcarían a nuestro país para siempre, convirtiéndose en una bisagra para la vida de aquellos de que una y otra forma nos vimos envueltos en las circunstancias ya sea como protagonistas del hecho bélico o como parte del pueblo que hizo lo suyo desde cada rincón de la patria”.
“Muchas vidas de perdieron, jóvenes con sueños e ideales. Para nosotros los exsoldados conscriptos el mandato era combatir y así lo hicimos. Dejamos en la defensa de ese sitio lo mejor de nosotros. Pusimos todo lo que teníamos y hasta un poco más. Muy desprovistos y a pesar de grandes adversidades nadie bajó lo brazos. De ahí se salía peleando y se peleó hasta no dar más, hasta cumplir el juramento a la bandera de dar la vida”, expuso.
Y señaló: “Nuestra juventud nos pedía estar a la altura del compañero ya que sabíamos que aún muerto de hambre y de frío se daría la vida por uno y combatiría hasta el último aliento”.
Así, el titular del Centro de Ex Soldados Combatientes expresó que en este contexto se podría “llenar páginas con el heroísmo y coraje de los compañeros caídos”, pero reparó en que todo ello “debe ser reinterpretado en virtud de la circunstancias”.
“Vemos que esta pandemia nos muestra otro camino. El hecho de que hoy el campo de batalla no se circunscribe a un campo de operaciones sino que la guerra está en las calles de todas las ciudades del mundo, hace que miremos la cantidad de fallecidos a nivel global por el Covid-19 y que los muertos duelan, todos”, señaló.
Y sumó: “Las bajas en las guerras se cuentan según los bandos y durante la contienda unos festejan los que otros lloran. Pero en esta guerra no hay bandos. Es la humanidad contra el virus y si todos tenemos la misma camiseta, todos los muertos son nuestros, y entre los del mismo equipo no podemos pelear. Esa creemos es nuestra gran oportunidad como especie”.
“Se dice -continuó- que no hay nada como un enemigo común para unir a las personas. Hoy vemos a los países colaborando entre sí para combatir la amenaza. La humanidad encerrada en su casa y dejando salir a través de la comunicación global lo mejor de cada uno desde el encierro. Si pudiéramos valorar de igual manera las vidas que se llevan las guerras como las que se lleve la pandemia habremos derrotado mucho más que a un virus”.
De esta manera, desde la institución que nuclea a excombatientes plantearon querer llevar “un mensaje de resiliencia hacia nuestros vecinos”.
“En las situaciones de extremo peligro o superviviencia es esencial atenerse a las normas y procedimientos establecidos. Si la consigna para ganar es el aislamiento ese debe ser su único norte, al igual que en una unidad de combate el error de uno puede costarle la vida no solo a él sino también a sus compañeros. Y al enemigo no hay que darle la oportunidad de vencerte. Lo que está en juego al romper el aislamiento es la vida de los demás, los que tienen tu misma camiseta”, expresaron en ese sentido.
Y pidieron: “La esperanza queda puesta en que cuando todo esto termine no solo festejemos el triunfo sino que sigamos jugando en el mismo equipo. Que lo que paradójicamente ha sido una lucha de los excombatientes como es el acceso a una salud de calidad para tratar las secuelas de la guerra pase a ser una lucha de la sociedad en su conjunto. Esta pandemia nos ha mostrado que la salud debe ser un derecho y no un negocio, y por ende una cuestión prioritaria e ineludible del Estado independientemente de su color político”.
Finalmente, remarcaron: “Después de esto no puede seguir el mundo siendo igual y depende de los ciudadanos generar el cambio de paradigma hacia un lugar que no tenga excluidos”. Y cerraron, en un mensaje a los vecinos: “Creemos en ustedes, en que van a estar a la altura del desafío para ganar esta batalla y todas las que se nos presenten en el futuro. Tomemos la inspiración de aquellos que creyendo en nosotros dieron su vida por la patria”.
