Buscan que el Estado recupere las playas del sur
Desde la década del 70’ son explotadas por empresas y sociedades de la familia Peralta Ramos. La iniciativa del abogado Julio Razona presentada en la Defensoría del Pueblo fue remitida al Concejo Deliberante.
El abogado Julio Razona recopiló información y realizó una presentación ante la Defensoría del Pueblo en la que instó al organismo municipal a accionar para que el Estado recupere las 106 hectáreas de las playas del sur que son explotadas por sociedades de la familia Peralta Ramos y que considera, fueron quitadas al control estatal con un fallo “nulo”. La petición surgió efecto y la Defensoría la ingresó en el Concejo Deliberante para su análisis.
En la presentación, el abogado hace foco en el aspecto “inconstitucional” de la posesión de las tierras, también el rol del Estado municipal en torno a los espacios públicos y su comercialización y, entre otros puntos, las dificultades que se emanan del borroso límite entre los dominios públicos y privados de todo el sector que comprenden las playas del sur, lo cual provoca no sólo desorden sino también conflictos de forma permanente.
“Esta situación ha privado por casi 50 años a los ciudadanos de disfrutar de playas que nunca debieron ser entregadas a privados y al Municipio de disponer o bien del uso público de las mismas o su explotación comercial, privándose de recaudar cientos de millones de dólares, simplemente ejerciendo el derecho a poseer y disponer de lo que es suyo”, advirtió el abogado.
En consecuencia, plantea que hay razones suficientes para que se actúe en contra de las firmas: “La entrega a la familia Peralta Ramos, que explota 30 playas del Sur de la ciudad, a través de la empresa Playas del Faro Sociedad Anónima Inmobiliaria fue llevada a cabo por un gobierno inconstitucional, de facto, que derrocó por la fuerza al presidente constitucional Arturio Ilia, y por una Corte Suprema de Justicia de la Nación ilegítima, cuyos titulares tomaron el Máximo Tribunal de la Nación por bando militar”.
REPASO HISTÓRICO
A modo de síntesis histórica, la familia de Patricio Peralta Ramos, el terrateniente que a fines del siglo XIX se hizo con gran parte de las tierras en las que hoy se emplaza Mar del Plata, explota económicamente las playas del sur de la ciudad a través de una serie de sociedades que responden a los intereses propios de los herederos.
Si bien vendieron gran parte de las tierras, se quedaron con un importante tramo de la zona costera del sur, las cuales fueron expropiadas en los ’30 para la construcción de la actual Ruta 11 que conecta con Miramar pero que en la década del 70 fueron devueltas por un fallo de la Corte Suprema, a través del cual se creó la sociedad Playas del Faro SA para gestionarlas.
En este punto radica el pedido de las entidades, ya que consideran que el fallo, dictado por jueces que fueron nombrados de forma inconstitucional por la dictadura de la autodenominada “Reorganización Nacional”, iniciada con el gobierno de facto de Carlos Onganía en 1966, resulta nulo.
A su vez, plantea incongruencias en la legislación municipal: “La ordenanza 8434/91, promulgada el 10 diciembre de 1991, aún vigente les permite disponer libremente de toda la costa sur dela ciudad. Lo que regula esta norma es una situación inédita en la Argentina: el sector de playas del Sur de Mar del Plata es el único caso en el país en que una ciudad mantiene parte del litoral marítimo en manos privadas”.
