El presidente de IOMA pidió a las clínicas negociar “con coherencia”
En medio de los crecientes reclamos, Homero Giles ratificó la voluntad de volver a negociar convenios “con nuevos valores”.
En sintonía con el mensaje dado esta semana de intentar “recomponer el vinculo” y firmar nuevos convenios con las clínicas Colón, Pueyrredon y 25 de Mayo que desde diciembre cortaron las prestaciones, el presidente del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), Homero Giles, pidió a las empresas médicas retomar las negociaciones “con responsabilidad y coherencia” y afirmó que “no se le puede pedir a una obra social de trabajadores estatales que pague precios de prepaga”.
Después del silencio público mantenido por las máximas autoridades de la obra social en torno al conflicto que fue escalando con el paso de los meses hasta llegar en diciembre al corte del convenio que, a través de la Federación de Clínicas (Fecliba), unía a los tres sanatorios con IOMA, las declaraciones de Homero Giles se conocieron esta semana cuando las protestas y reclamos de personas afiliadas se potenciaron ante la falta de respuestas.
Es esa línea, después de que desde la obra social se asegurara ante afiliados y afiliadas que existen negociaciones con las clínicas Colón, Pueyrredon y 25 de Mayo en busca de intentar “recomponer el vinculo” y firmar nuevos convenios, el presidente de la obra social ratificó la voluntad de seguir negociando con el sector, pero planteó algunos reparos y pedidos en torno a la génesis del conflicto.
“Estamos dispuestos a asumir el costo de una nueva negociación con nuevos valores pero recuerdo que somos el IOMA, somos una obra social de trabajadores estatales y nadie le puede pedir a una obra social de trabajadores estatales que pague precios de prepaga”, definió Giles en una breve declaración radio Provincia (AM 1270) difundida desde la obra social.
Y en el mismo sentido completó que “una prepaga tiene una cápita por lo menos cinco veces superior a la de IOMA, es impensado esa situación”. De esa manera consideró y pidió a las clínicas “negociar con responsabilidad y con coherencia”.
El conflicto, que incluye diversos reclamos que hacen a la cobertura de la obra social y que escaló esta semana con nuevas protestas, terminó por estallar cuando a mediados de diciembre, con intervención y aval judicial de por medio, las clínicas Colón, Pueyrredon y 25 de Mayo decidieron terminar el convenio que las unía a IOMA a través de Fecliba, disconformes con los aranceles y con los plazos de pago.
Previamente, en septiembre, la obra social había dado de baja a distintos profesionales del padrón ante denuncias por “cobros indebidos” sin ningún tipo de facturación y por fuera de los convenios que estaban vigentes mientras en paralelo las clínicas se quejaban por los bajos aranceles estipulados.
